El primer avión que transporta municiones estadounidenses aterrizó en suelo israelí este 10 de octubre, informaron las Fuerzas Armadas de Israel, de acuerdo con reportes de la prensa del país norteamericano.
Horas antes, durante una conferencia de prensa, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que Washington ofreció ayuda militar y municiones para la Operación Espadas de Hierro —lanzada por Israel el 7 de octubre tras los ataques de Hamás— y que no se quede sin suministros para defenderse.
“Nos aseguraremos de que Israel tenga todo lo que necesita para proteger a sus ciudadanos y defenderse (…). Estamos listos para desplegar recursos adicionales cuando sea necesario”, aseveró el mandatario norteamericano.
El vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, comentó paralelamente que la Administración Biden espera que en los próximos días haya solicitudes adicionales por parte de Tel Aviv de asistencia en materia de seguridad, “a medida que sigan gastando municiones en esta lucha”,
“Nos mantendremos a su lado, asegurándonos de que cubrimos sus necesidades lo mejor que podemos y lo más rápido que podemos”, agregó.
Por su parte, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aseguró en redes sociales que sostuvo una tercera llamada con el jefe de Estado del país norteamericano, en la que le agradeció su apoyo incondicional y le aseguró que será “necesaria una campaña prolongada y poderosa en la que Israel ganará”.
El 7 de octubre, el movimiento palestino Hamás comenzó una serie de ataques con proyectiles e infiltraciones en el territorio de Israel, ante lo que el Ejército israelí respondió con bombardeos sobre la Franja de Gaza.
Poco después, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lanzaron la Operación Espadas de Hierro. Mientras que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró que el país “está en guerra”.
En las primeras cuatro oleadas de ataques aéreos, Israel lanzó unas 2.000 municiones y más de 1.000 toneladas de bombas sobre Gaza.
Según los últimos datos disponibles, la escalada de violencia ha causado unos 1.000 muertos y más de 3.400 heridos en Israel, a los que se suman unos 900 muertos y 4.500 heridos en Gaza, así como más de 100 personas, tanto militares como civiles, que fueron secuestradas durante el ataque y están cautivas en el enclave palestino.
Además, la nueva espiral del conflicto palestino-israelí desplazó a más de 200.000 gazatíes, según informó este 10 de octubre el portavoz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Farhan Haq.
En tanto, el 11 de octubre, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, realizará un viaje a Israel para conversar con los líderes de dicha nación, según informó el portavoz de la instancia federal, Matthew Miller.
Fuente:https://sputniknews.lat
Foto:CC0 / U.S. Air Force / C-17 test sortie
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