El juicio promovido por Graham Chase Robinson, ex vicepresidenta de producción y finanzas de Canal Pictures, no tiene sentido, aseguró el actor Robert De Niro, quien es dueño de dicha compañía.
Aunque argumentó que la disputa no tendría razón de ser, De Niro tuvo que tomar el estrado por segunda vez, enfrentándose a cargos por discriminación en razón de género.
“Todo el caso no tiene sentido. Es absurdo. ¡Pero aquí estoy!”, dijo el artista al ser cuestionado por la defensa de Robinson.
De Niro, informó The Hollywood Reporter, se la pasó evadiendo numerosas preguntas de la defensa.
Se le preguntó si él había llamado a Robinson mientras esta se encontraba en el baño, si le había pedido a Robinson que rasque su espalda, y si había presentado una demanda por malversación de fondos en contra de Robinson con la intención de dañar su reputación.
“Denme una pausa de este disparate. ¿Nos tienes a todos aquí para esto?”, expresó, insistiendo en que el juicio es una pérdida de tiempo.
“¡Qué vergüenza, Robinson!”, agregó.
Según apuntó Robinson, De Niro habría hecho “comentarios vulgares, inapropiados, y sexistas”, le habría pagado menos debido a su género, y la habría explotado laboralmente.
A pesar de ser una ejecutiva, a Robinson se le habría pedido también reparar prendas y hacer lavandería, se le habría llamado durante un funeral familiar, y se le habría pedido que entregue un martini a De Niro a las 11 p.m.
Graham Chase Robinson renunció a ser asistente de De Niro y ejecutiva de Canal Pictures en abril del 2019, solicitando una liquidación de 300 mil dólares, cobertura médica, y una carta de recomendación.
“Las pelotas, el nervio, la osadía. ¿Cómo se atreve?”, manifestó De Niro cuando tal solicitud fue presentada como evidencia.
Se espera que el juicio continúe hasta el 10 de noviembre.
Por: Paula Román – eitmedia.mx
