Tras la desaparición de los Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas y las Juntas de Buen Gobierno —conocidos como Caracoles—, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) de México dio a conocer su nueva estructura interna, con la que la guerrilla mexicana busca enfrentar la crisis de violencia que afecta al sureño estado de Chiapas.
“Se ha reorganizado la estructura y disposición del EZLN de modo de aumentar la defensa y seguridad de los poblados y de la madre tierra en caso de agresiones, ataques, epidemias, invasión de empresas depredadoras de la naturaleza, ocupaciones militares parciales o totales, catástrofes naturales y guerras nucleares”, detalló en un comunicado el vocero del movimiento, el subcomandante Moisés.
Precisó que, a partir de ahora, la estructura del EZLN se sustentará en los Gobiernos Autónomos Locales (GAL), considerados el núcleo de la autonomía del movimiento y coordinados por los agentes y comisariados autónomos, “sujetos a la asamblea del pueblo, ranchería, comunidad, paraje, barrio, ejido, colonia, o como se autonombre cada población”.
Cada GAL, detalla el comunicado, controla sus recursos autónomos organizativos —tales como escuelas y clínicas— y la relación con pueblos hermanos no-zapatistas vecinos. Además, controla el buen uso de la paga, detecta y denuncia las malas administraciones, las corrupciones y los errores que puede haber, y está pendiente de quienes se quieren hacer pasar como autoridades zapatistas para pedir apoyos o ayudas que usan para beneficio propio.
En segundo término, los GAL convocarán a los Colectivos de Gobiernos Autónomos Zapatistas (CGAZ), en donde se discutirán y acordarán decisiones relacionadas con los intereses de los convocantes. Por ejemplo, planes de salud, educación, agroecología, justicia, comercio, etc.
A decir del subcomandante Moisés, los CGAZ no son autoridades y su trabajo es hacer que se cumplan las peticiones de los GAL, así como los trabajos necesarios para la vida comunitaria, como campañas de medicina preventiva y vacunación, encuentros deportivos y culturales o las festividades tradicionales.
“Cada región o CGAZ tiene sus directivos, que son los que convocan a asambleas si hay algún problema urgente o que afecta a varias comunidades”, precisó el subcomandante.
En tercer término están las Asambleas de Colectivos de Gobiernos Autónomos Zapatistas, ACGAZ, anteriormente conocidas como zonas. Estas dependen de los CGAZ que, a su vez, dependen de los GAL. Así, las ACGAZ tendrán la función de convocar y presidir las asambleas de zona que soliciten los GAL y CGAZ. Además, las ACGAZ tendrán su sede en los caracoles, que se moverán de acuerdo con las necesidades de los pueblos.
“Las zonas (ACGAZ) y las regiones (CGAZ) están mandadas por los pueblos, deben rendir cuentas a los pueblos y buscar la forma de cumplir con sus necesidades en Salud, Educación, Justicia, Alimentación y las que se presenten por emergencias ocasionadas por desastres naturales, pandemias, crímenes, invasiones, guerras, y las demás desgracias que depare el sistema capitalista”, detalló el vocero de la organización.
Alzado en armas contra el Gobierno de México el 1 de enero de 1994, en repudio a la política neoliberal del entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, el EZLN es una fuerza de conformación indígena que, desde entonces, ha mantenido una crítica permanente a la política tradicional del país latinoamericano.
En 2021, el EZLN advirtió que Chiapas “está al filo de la guerra civil con la presencia de paramilitares, miembros de diferentes cárteles que se disputan plazas y grupos de autodefensa”.
El 6 de noviembre, a pocos meses del 30º aniversario del levantamiento, la guerrilla comunicó que desintegraría la estructura civil del movimiento. “Les iremos explicando cómo es y cómo se ha ido gestando la nueva estructura de la autonomía zapatista”, dijo el subcomandante Marcos.
Fuente:https://sputniknews.lat
Foto: Tomada de https://twitter.com/radiopozol
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