Youth gonne wild
La apuesta es simple. Es el momento histérico para el relevo generacional. Cometer parricidio contra los mayores. Usando las instituciones y sus reglas. Deconstruir cada una de las paredes del armatoste descascarado de la democracia.
Observaremos a los menores de 35 años. Incluso algunos veinteañeros con sueños e ínfulas de revolucionarios orgánicos.
Sus estrategias están en las redes sociales. En el tik tok chino. Al Instagram lo convierten en plataforma idealista. En X antes Twitter denostar en pocas frases a sus antagonistas. Así en cada una de las aplicaciones. Lo importante es y será generar contenido escandaloso.
Sume, además, los artículos promocionales.
Esto es apenas la precandidatura. El encendido de los motores para la simulada acción al interior de los partidos políticos. Nada más falso. Inexistente.
Van encarrilados a fajarse contra los sparrings. Colocar a sus favoritos en las listas plurinominales. Recibir a los donantes anónimos mediante terceras personas. Cash para la selección de delegados o del ungidor de las voluntades infladas.
Sonría para la cámara de los fotoperiodistas. Responda a cada una de las preguntas a modo. Es el año de las transformaciones. A sus hogares los viejos con sus hábitos de corrupción. Ahora nos toca a nosotros el saqueo de la nación.
En la pegatina viene el compromiso. Los volanteos y los eventos privados son de carácter público. Mostrar músculo. Eso es. El gimnasio de los precandidatos. Fuertes, sonrientes e impostores. Listos. Devoraran a sus mentores. Juventud siendo salvaje.