La mayoría de los trabajadores mexicanos viven una situación laboral precaria desde hace décadas, misma que fue empeorando al pasar el tiempo con la pérdida de derechos laborales, bajos salarios y muchas horas de trabajo acumuladas a la semana, que ubican al país como uno con las peores condiciones en este rubro.
Aunque en los últimos cinco años ha habido iniciativas, leyes y acciones de gobierno para mejorar la situación laboral de los millones de trabajadores mexicanos, lo cierto es que los indicadores internacionales muestran que el país latinoamericano se ubica como el que más tiempo trabaja y menos ingresos recibe, si se le compara con naciones similares.
“La situación laboral en México siempre ha sido pésima para muchos”, dice a Sputnik Juan Ayala, un técnico electricista mexicano de 60 años que lleva la mayor parte de su vida trabajando bajo las condiciones del mercado laboral mexicano. “En otros países nos llevan bastante adelanto en ese aspecto”, agrega.
Y el señor Ayala tiene razón, ya que si a México se le compara con los demás miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se ubica como el que tiene la peor relación horas de trabajo-remuneración, puesto que se ubica como el país con mayor número de horas promedio trabajadas y el que tiene el menor nivel de remuneración promedio.
De acuerdo con datos de la misma OCDE, México es el país que más trabaja con un total de 2.137 horas al año, cuando el promedio de la OCDE es de 1.726 y el de Dinamarca (el país que menos trabaja) es de 1.380 horas de trabajo anuales. Es decir, los mexicanos trabajan casi 800 horas más al año que los daneses.
Esta situación, en entrevista con Sputnik, el experto en el ámbito laboral mexicano y activista Efraín Salazar, señala que “es grave”, pues la importante cantidad de horas trabajadas no se ve reflejada en un buen sueldo para los empleados mexicanos, pues el país registra el sueldo más bajo promedio de la OCDE con 16.685 dólares anuales, mientras que el promedio de ese organismo se ubica en 53.416 dólares y el de Islandia, el país en el que más dinero se gana, tiene un promedio de ingresos de 79.473 dólares al año.
Así, en promedio, los mexicanos trabajan 44 horas semanales, aunque a veces más. “Ahora que hice cuentas, noté que trabajo 50 horas a la semana y creo que por ley son 48″, analiza el señor Ayala.
“La gente sigue trabajando 48 horas, al menos en el papel, pero su sueldo no aumenta de la misma manera”, apunta Efraín Salazar, también creador de la cuenta “El hada de las vacantes”.
Los responsables
Sobre el porqué se presenta esta precaria situación laboral de los mexicanos, existen varias hipótesis, algunos creen que se debe a una baja productividad de los trabajadores, pero los empleados acusan a los empresarios y también a los políticos, sectores que, según ellos, se coluden para afectar a la clase trabajadora.
“Los empresarios han sido abusivos y el trabajador arrinconado y condicionado, ellos siempre se van a proteger, tienen más de 70 años coludidos con los políticos”, acusa el señor Juan Ayala.
Un ejemplo de esa alianza entre empresarios y políticos fue la reforma laboral aprobada en 2012 durante el sexenio del expresidente Felipe Calderón, en la que se aprobó el outsourcing o subcontratación, un modelo laboral en el que las empresas contrataban a los empleados a través de un tercero y no estaban obligadas a ofrecer las prestaciones mínimas de ley.
“A mí me tocó vivir el outsourcing, con eso acabaron con las prestaciones, con las horas extras, con las vacaciones, con el aguinaldo, las utilidades, todo eso lo acabaron el PAN, el PRI y el PRD. Con eso hubo mucha evasión de impuestos”, cuenta Ayala.
El inicio del esquema de subcontratación desde el sexenio de Calderón abonó a la precarización de la situación laboral en México durante el siguiente sexenio, el de Enrique Peña Nieto, cuando, según el informe, el sexenio del empleo precario y los bajos salarios, la situación de los empleados mexicanos empeoró.
“En la administración de Peña Nieto, la precariedad en las condiciones laborales, con población sin seguridad social, contratación no permanente y sin prestaciones, se vio acompañada de creación de puestos de trabajo con menores salarios y destrucción de empleos con mayores remuneraciones”, se lee en el estudio.
De acuerdo con el análisis, entre 2013 y el 2018 se crearon 3.189.748 puestos de trabajo en esta población que recibe entre uno y dos salarios mínimos. Por el contrario, donde más fuentes de trabajo se perdieron, con un total de un 158.065 empleos, fue entre quienes reciben de sueldo más de tres y hasta cinco salarios mínimos.
Mejora, pero no suficiente
El Gobierno del actual presidente Andrés Manuel López Obrador, junto con algunos legisladores, han tomado medidas para revertir esta precarización de los trabajadores mexicanos, como la reforma a la Ley Federal del Trabajo, en la que se prohíbe la subcontratación de personal, pero permite la subcontratación de servicios especializados.
También se ha aumentado de manera sostenida de entre 15 y 20% el salario mínimo en México en los últimos años, con lo que pasó de 88,36 pesos (4,4 dólares) diarios en 2018 a 207,44 pesos (10,37 dólares) en 2023. Pese a ello, el pago mínimo se mantiene como uno de los más bajos de la OCDE, aunque ese mismo organismo reconoció a México como el país con el mayor aumento dentro de sus países miembros, con un crecimiento del 43,6% entre diciembre de 2020 y mayo de 2023, comparado con el modesto aumento del 2,3 % en los salarios mínimos reales en la OCDE durante el mismo período.
Reducción de la jornada laboral
Ahora, un grupo de legisladores, activistas y grupos de trabajadores buscan disminuir a 40 las 48 horas de trabajo laborales establecidas en la ley, como lograron hacer con el aumento de los días de vacaciones, pero en esta ocasión se han enfrentado a una mayor resistencia, especialmente del sector empresarial. “Hay una fuerte resistencia de la clase empresarial a mejorar la situación laboral de los empleados”, dice Efraín Salazar.
Desde el sector empresarial, organismos como la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) piden que se posponga la discusión de la reforma de las 40 horas de trabajo, al menos hasta cuando haya un incremento sólido en la productividad en el país.
“Se ha avivado la discusión por la reducción de la jornada laboral de 48 horas, que es lo que marca la ley, a 40; sin embargo, no solamente es un debate que debió haber pasado hace mucho tiempo, sino que incluso, esto de las 48 horas ni siquiera son las que se trabajan, ya que hay muchas personas que se ven obligadas a trabajar horas extras sin que se les paguen”, revela Salazar.
El 22 de noviembre, la iniciativa para la reducción de la jornada laboral a 40 horas alcanzó la recta final al ser aprobada en la Comisión de Puntos Constitucionales y se espera su pronta votación en el pleno de la Cámara de Diputados. Este posible cambio ha generado gran expectativa y hasta esperanza entre los trabajadores. “En el trabajo todos estamos a la expectativa de que se apruebe la ley para disminuir las horas de trabajo”, concluye el señor Juan Ayala.
Fuente:https://sputniknews.lat/
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