Debido a que omitió registrar un lujoso reloj suizo Audemars Piguet, Arnold Schwarzenegger fue detenido en el aeropuerto de Múnich, cuando se dirigía a Austria, tras una inspección aduanera.
Fue como parte de un control aleatorio que las autoridades alemanas revisaron las pertenencias del actor estadounidense, a quien nunca se le había solicitado previamente completar algún formulario de registro.
“Hemos iniciado un proceso penal en virtud del derecho fiscal. El reloj debió haber sido registrado porque es una importación”, explicó Thomas Meister, portavoz de la Oficina Central de Aduanas de Múnich.
“Si la mercancía permanece en la UE, hay que declararla en la aduana. Esto se aplica a todos, ya sea que se llamen Schwarzenegger o Müller, Meier, Huber”, agregó.
Schwarzenegger pasó una hora, entre agentes aduaneros, intentando pagar, con una terminal bancaria defectuosa, los impuestos correspondientes del costoso artefacto.
Ante el fracaso, los agentes llevaron al protagonista de “Terminator” a un cajero automático, en donde tuvo dificultades con la cifra límite para retiros de efectivo.
Tuvieron que pasar tres horas y media para que otro oficial trajera una terminal funcional, con la que Schwarzenegger logró hacer el pago de 26 mil euros por el valor estimado del reloj, más 4 mil euros de impuestos y una multa de 5 mil euros.
Con un valor estimado de 500 millones de euros, la pieza Audemars Piguet será subastada mañana durante una cena de recaudación de fondos, en beneficio de la organización medioambiental sin fines de lucro “Schwarzenegger Climate Initiative”.
Por: Paula Román – eitmedia.mx
Foto: @WBCdefenders (Twitter)