Ciudad de México.- La divisa mexicana cerró la semana con una ligera depreciación de 0,35 por ciento, cotizando alrededor de los 17,00 pesos por dólar, con lo cual rompe una racha positiva de tres semanas, indica un análisis financiero publicado el viernes.
“El peso cerró la semana con una depreciación de 0,35 por ciento o 5,9 centavos, cotizando alrededor de 17,11 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 17,06 y un máximo de 17,15 pesos por dólar”, indica un reporte del Banco Base.
El peso registra así su primera caída semanal, luego de ganar terreno durante tres semanas consecutivas en las que acumuló una apreciación de 0,61 por ciento, según el informe enviado a los clientes en los mercados financieros.
La depreciación se debe dos factores, indica el estudio: el primero es que ha fortalecido la expectativa de que el Banco de México (Banxico, central) podría comenzar a recortar la tasa de interés en marzo, luego de que la inflación de la primera quincena de febrero se ubicó por debajo de las expectativas del mercado, en una tasa anual de 4,45 por ciento.
Los informes sobre las decisiones de política monetaria -del 8 de febrero pasado- indican que “la mayoría de los miembros de la Junta de Gobierno enviaron la señal de que a partir de marzo podría ser apropiado discutir un recorte de la tasa de interés”.
El dólar se mantuvo estable, mostrando un retroceso semanal de 0,14 por ciento en el índice ponderado de varias monedas con mayor liquidez como la mexicana.
Sin embargo, en el mercado de divisas de EU, donde se esperan decisiones de la Reserva Federal (FED, banco central estadounidense), “el mercado ya no descuenta un recorte de la tasa de interés en junio y ahora anticipa que el primer recorte de 25 puntos base ocurrirá el 31 de julio”, estima el equipo del banco mexicano.
En segundo lugar, los precios de los energéticos registraron caídas semanales.
El crudo de referencia en el continente americano, West Texas Intermediate, perdió 3,33 por ciento, cotizando en 76,57 dólares por barril, mientras que los precios de la gasolina y del gas cayeron 2,59 por ciento y 1,06 por ciento, respectivamente.
“Las caídas se deben al riesgo de un debilitamiento de la demanda, principalmente de China”, dice el análisis.
Asimismo, durante la semana la Administración de Información de Energía en EU reportó que los inventarios se elevaron en 3,5 millones de barriles.
“Las pérdidas en los precios de los energéticos ocasionaron caídas en las divisas de economías emergentes o de países productores de materias primas”, como es el caso mexicano.