Monseñor Salvador Rangel, obispo emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, fue encontrado con vida tras dos días de haber desaparecido en circunstancias que aún no han sido aclaradas, confirmó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM). Las autoridades locales barajan la posibilidad de que haya sido secuestrado y después liberado.
El jerarca católico fue hallado internado en un hospital del estado de Morelos, en el centro del país latinoamericano, de acuerdo con el CEM.
“En cuanto se tenga más información sobre su estado de salud y las circunstancias de su localización, se dará a conocer oportunamente”, indicaron las autoridades católicas mexicanas, horas después de que exigieran al Gobierno de López Obrador dar con el paradero del obispo.
Informamos que el Excelentísimo Monseñor Salvador Rangel Mendoza, Obispo Emérito de la Diócesis de Chilpancingo Chilapa, ha sido localizado y se encuentra en el Hospital General “Dr. José G. Parres”, perteneciente al sistema de salud pública del Estado de Morelos en Cuernavaca. pic.twitter.com/U1Fc8rQaPB
— CEM (@IglesiaMexico) April 30, 2024
El titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Uriel Carmona, dijo a la cadena televisiva Milenio que Rangel pudo haber sido víctima de “un secuestro exprés”, pero comentó que todavía se encuentran investigando el caso y aún no hay una versión final sobre lo ocurrido.
El diputado mexicano Fernando Reina Iglesias, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), aseguró que es necesario conocer las circunstancias en las que desapareció temporalmente monseñor Salvador Rangel, quien durante los últimos años promovió un acuerdo de paz entre los cárteles del narcotráfico que operan en el estado de Guerrero, en el suroeste de México.
“Lo que tenemos que saber es qué lo llevó, qué incidente, que accidente lo llevó a estar hospitalizado y desaparecido desde el sábado anterior”, dijo el legislador a medios locales.
El obispo emérito Salvador Rangel denunció constantemente “la falta de peso moral y social” de las autoridades mexicanas frente al crimen organizado, e incluso tuvo contacto con varios grupos delictivos para tratar de pacificar la zona de Guerrero.
“Aquí los que han ganado la batalla son los narcotraficantes”, dijo el obispo en febrero a medios locales.
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© Foto : Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM)
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