La Guardia de Proximidad de Apodaca rescató a una joven estudiante que fue víctima de un secuestro virtual, siendo obligada a permanecer en el interior de una café ubicado en una plaza comercial.
Este es el segundo caso de este tipo que se resuelve en los últimos seis días.
El caso más reciente ocurrió ayer miércoles. A las 19:57 horas una joven identificada como Karol, de 17 años, pidió auxilio al 911, por lo que el C4 de la Secretaría de Seguridad Pública de Apodaca envió a policías preventivos al sitio donde se encontraba.
La chica dijo que poco antes se encontraba en su casa, donde recibió una llamada de un teléfono celular, cuyo interlocutor le hizo preguntas sobre su padre, proporcionándole los datos que le solicitaron.
Enseguida, la persona le indica que debe trasladarse a la Plaza Altea Huinalá, ubicada en Avenida Miguel Alemán y el bulevar Julián Treviño Elizondo, en la colonia Parque Industrial el Milagro, en este municipio de Apodaca.
El sujeto le señala a Karol que se introduzca en el establecimiento Tim Hortons y que permanezca allí hasta nuevas indicaciones. La chica opta entonces por llamarle a su padre a su celular, pero se encontraba fuera del área de servicio.
Acto seguido, la menor pidió el auxilio a la policía de Apodaca, por lo que en cuestión de minutos llegaron hasta ella los guardias de proximidad para apoyarla. Karol les platicó lo ocurrido y los policías se comunicaron con su padre.
El padre les dijo a los preventivos que resguardaran a su hija mientras él pasaba por ella. Al llegar, el padre relató que tras la llamada de los policías recibió una llamada de un desconocido quien le dijo que tenían a su hija, solicitándole 300 mil pesos para liberarla.
El padre de Karol hizo caso omiso de la llamada y colgó, para minutos después encontrase con su hija y los policías preventivos.
Emocionados hasta las lágrimas, padre e hija se reencontraron en el café de la plaza comercial, agradeciendo a los Guardias de Proximidad por su eficiencia.
“TENGO SECUESTRADO A TU HIJO…”
Otro caso ocurrió el sábado pasado. José Manuel, estudiante de preparatoria de 16 años, recibió una llamada por la mañana, cuando se encontraba en una clase de Teatro en la Preparatoria 22 ubicada en Guadalupe, Nuevo León.
El sujeto que le marcó le indicó a José Manuel, vecino de Apodaca, que saliera de la escuela y se fuera al centro comercial más cercano, y que si no obedecía matarían a toda su familia, a cuyos integrantes “ya tenían ubicados”.
Simultáneamente los delincuentes le hicieron una llamada al celular de la madre del menor, a quien le dijeron tenerlo secuestrado y le exigieron 150 mil pesos para “liberarlo”.
“Tengo secuestrado a tu hijo, tienes que hacer un depósito de 150 mil pesos; si no lo haces lo voy a matar”, le indicó el desconocido.
La madre de familia dio parte a la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad de Apodaca, por lo que de inmediato se llevó a cabo un operativo de búsqueda, pidiéndole a la mujer que no depositara nada, ya que este modo de operar de delincuentes es un patrón que se viene realizando en la zona metropolitana de la ciudad.
La mujer y su familia recibió un acompañamiento permanente y fue apoyada y orientada para salir adelante en el momento que le aquejaba.
La madre de familia de 35 años sufrió en carne propia la incertidumbre por no saber de su hijo durante ocho horas, pues durante ese lapso no le contestó su celular por estar hackeado por los delincuentes, pero alrededor de las 15:30 horas le contestó, diciéndole donde se encontraba.
Los policías preventivos ya habían también localizado al menor en interior del ciber “Jahdai”, ubicado en la Plaza comercial Soriana la Fe, ubicada en la Avenida Rómulo Garza y la Avenida Miguel Alemán en la Colonia La Fe, en San Nicolás de los Garza, donde se le entregaron sano y salvo a su mamá.
eitmedia.mx
