Ciudad de México.- Al menos 93,5 millones de los 99 millones de ciudadanos en edad de votar en México, donde el voto no es obligatorio, ya están registrados en la lista nominal con credencial de elector para participar el 2 de junio en el sufragio más grande en la historia del país, con más de 20.700 cargos públicos en juego.
El próximo domingo se celebran elecciones a la Presidencia de la República, el Senado y la Cámara de Diputados del Congreso federal, nueve gobernadores, incluida la jefatura de Gobierno de la capital, y un 80 por ciento de los casi 2.500 alcaldías, que abarcan más de 1,97 millones de kilómetros cuadrados.
En estos megacomicios se eligen gobernadores de Chiapas (fronterizo con Guatemala), Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz, Yucatán y la Ciudad de México.
Si las encuestas no fallan, el país norteamericano podría elegir por primera vez a una mujer para ocupar la silla presidencial, emblema de poder dominado por un águila devorando una serpiente sobre un cactus, que figura en el escudo nacional.
En un país conocido por una cultura política machista, personalista y autoritaria, producto de su historia, este sería un acontecimiento trascendental.
La disputa por el Congreso no es un asunto menor: el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, ha planteado para la siguiente administración un programa de 20 reformas constitucionales para que el próximo Poder Legislativo apruebe lo que denomina el “Plan C”.
Pero modificar la Carta Magna requiere de dos terceras partes de ambas cámaras del Congreso, y el oficialismo perdió esa “mayoría calificada” en los comicios de medio mandato sexenal de 2021, lo que cerró las puertas a las reformas constitucionales durante los últimos tres años del presidente saliente.
La candidata oficialista, Claudia Sheinbaum, una científica en ingeniería energética, de 61 años y surgida del movimiento estudiantil universitario, llega como favorita en las principales encuestas y ha prometido llevar adelante el programa de López Obrador.
Ese catálogo de reformas se enfoca en restringir el poder de la Suprema Corte de Justicia, y eliminar los organismos autónomos del Estado, como los dedicados a temas de transparencia o regulación de la industria energética o de competencia económica.
Plantea además elegir por voto popular a los integrantes del Poder Legislativo y del Instituto Nacional Electoral.
Los candidatos opositores, Xóchitl Gálvez , de 61 años, del Frente Amplio Fuerza y Corazón; y Jorge Álvarez Máynez, 38, del Partido Socialdemócrata, prometen contener contra lo que consideran “el regreso al presidencialismo autoritario”, que predominó durante casi todo el siglo XX mexicano.
CRECIMIENTO ECONÓMICO MODERADO
México es una economía integrada en las últimas tres décadas a la región de Norteamérica gracias al Tratado México, EEUU, Canadá de Libre Comercio (T-MEC), que deberá ser renegociado en 2026, a dos años de comenzar el próximo sexenio.
El principal motor de la economía mexicana es la industria manufacturera -después de abandonar su dependencia del petróleo a finales del siglo XX-, en la que destaca la industria automotriz y electrónica, y se ha convertido en el principal socio económico de EEUU, dejando atrás a China y Canadá.
Las exportaciones mexicanas a EEUU sumaron 480.000 millones de dólares en todo 2023, con un alza interanual de 5 por ciento, que representan más del 80 por ciento de sus ventas al exterior.
Las importaciones ascienden a un monto similar, para acercarse a la cifra de un billón de dólares de intercambio bilateral con la economía número uno del mundo.
Sin embargo, las autoridades monetarias proyectan una ralentización del crecimiento económico y un avance moderado de 2,4 por ciento en 2024, que es casi medio punto menos que el previsto a principios de este año.
Entre 1980 y 2022, la segunda economía latinoamericana registra un modesto crecimiento promedio de 2,0 por ciento anual, y en el sexenio que termina (2018 -2024) el promedio de avance ha sido un marginal 0,8 por ciento anual, en el marco de la pandemia y una creciente deuda pública.
La inflación ronda el 5 por ciento, con lo cual alcanzar la meta de un 3 por ciento deberá esperar hasta el cuarto trimestre de 2025, según la autoridad monetaria.
Un tema crítico es la deuda pública creciente: aumentó casi tres puntos porcentuales del Producto Interno Bruto (PIB), y el déficit de 2024 es de cinco puntos del PIB.
El país avanzó en el combate a la pobreza en los últimos cinco años: si bien las cifras de personas en situación de pobreza siguen siendo altas (46,8 millones de mexicanos), con López Obrador unos 5 millones de personas salieron de dicha condición.
Sin embargo, aumentó la pobreza extrema a un 7,1 por ciento, según el estatal Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.
Las clases medias se redujeron en un 9,6 por ciento, según la misma fuente.
En el sexenio que termina, el salario mínimo ha tenido incrementos de alrededor de 20 por ciento anual y se coloca en 249 pesos diarios (14,4 dólares).
SEGURIDAD PÚBLICA
El mayor reto de la próxima administración estará en la seguridad pública: con más de 188.000 asesinatos, podría terminar el sexenio de López Obrador arriba de los 200.000 muertos.
Según la consultora T-Research especializada en registros oficiales de violencia, los homicidios en la administración superan el récord de 156.066 asesinatos en los seis años de gestión de Enrique Peña Nieto (2012-2018).
En seis años los desaparecidos suman unos 100.000 personas y la tercera parte habría ocurrido en la administración saliente.
Pero también crecieron los delitos de alto impacto: la extorsión aumentó un 56 por ciento y el narcomenudeo (venta de drogas minorista) creció en 48 por ciento.
El territorio bajo control del crimen organizado es casi la tercera parte, según organizaciones civiles y agencias estadounidenses.
Un informe sobre violencia política de la consultora Integralia reporta que, desde que comenzó el proceso electoral en septiembre pasado, delincuentes perpetraron ataques que causaron un promedio diario de 2,8 víctimas de agresiones.
Esa cifra reúne 35 asesinatos -si se incluye la mencionada ejecución -, atentados con armas de fuego, amenazas, secuestros, desapariciones y otras formas de violencia consideradas “de alto impacto”.
Para el Gobierno, los candidatos asesinados son sólo 22, porque otras víctimas no habían registrado oficialmente sus candidaturas, según la cartera federal de Seguridad Pública.
“Las víctimas han incrementado 150,5 por ciento en comparación con 2021, considerando homicidios y otros eventos de alto impacto, como atentados con arma de fuego y amenazas”, indica el informe de Integralia, publicado a cuatro días de los comicios.
Hasta la fecha van 749 víctimas de diversos ataques, que son 550 personas afectadas más que las 299 contabilizadas en las elecciones legislativas de medio mandato presidencial de hace tres años, en 2021.
Si se mantiene el promedio diario, la consultora proyecta más de 760 víctimas totales (muertos, heridos y sobrevivientes) después de la elección, indica el informe. (Sputnik)
Fuente:https://latamnews.lat/
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