Río de Janeiro (Brasil).- El Gobierno brasileño se posicionó el lunes en contra de un proyecto de ley tramitado en el Congreso Nacional para modificar la Constitución para permitir que áreas de litoral en manos del Estado pasen a propiedad privada.
“El Gobierno está en contra de ese programa de privatización de las playas brasileñas que va a cercenar el acceso de la población brasileña a las playas y crear verdaderos espacios privados, cerrados”expresó el ministro de las Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, en declaraciones a reporteros y en sus cuentas de redes sociales.
La Propuesta de Enmienda a la Constitución (PEC) está siendo guiada por el senador Flávio Bolsonaro (hijo del expresidente Jair Bolsonaro) y genera controversia entre quienes la consideran un ataque a un espacio público que pone en riesgo la biodiversidad y los que consideran que dará más seguridad jurídica y favorecerá el desarrollo económico.
La propuesta prevé que los llamados terrenos de Marina (33 metros después de la línea del mar) que ahora pertenecen al Estado pasen a manos de los gobiernos de los estados, de los municipios o incluso de propietarios privados.
Según los críticos con la propuesta, eso abre la posibilidad de construcción de hoteles, resorts o urbanizaciones que cierren el acceso a las playas, imposibilitando el acceso al conjunto de la población.
La propuesta ya había sido aprobada en la Cámara de Diputados en febrero de 2022 (durante la administraci[on Bolsonaro), pero estaba parada en la Comisión de Constitución y Justicia del Senado desde agosto del año pasado.
Si la mencionada Comisión aprueba la medida pasará a ser votada en el plenario del Senado, donde podría ser refrendada definitivamente. (Sputnik)
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