En el actual Gobierno de López Obrador, la empresa paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) estaría entregando menos recursos a la administración pública y quedándose con más dinero para su propia operación y sus deudas.
De acuerdo con cifras de un representante de la organización México Evalúa, en los últimos dos años, la paraestatal mexicana ha entregado un menor porcentaje de la renta petrolera a las arcas de México, pues cada vez se queda con más recursos que destina a pagar su deuda, costos e inversiones.
Jorge Cano, investigador de México Evalúa, explicó al diario El Economista que, como una empresa del Estado, la renta petrolera que obtiene Pemex se divide en dos: una parte se la entrega al Gobierno federal, mientras que otra parte se la queda la compañía.
Según datos publicados por el diario mexicano, durante la primera mitad del 2024, los ingresos petroleros (la renta petrolera) ascendieron a 547.199 millones de pesos, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). De esa cantidad, Pemex se quedó con el 83%, es decir, con 455.479 millones de pesos, mientras que el 17% restante o 91.719 millones de pesos se le entregó al Gobierno federal
Esa proporción en la división de la renta petrolera es la más baja para la Federación al menos desde 1990, destaca El Economista, y agrega que, a finales del Gobierno de Enrique Peña Nieto, predecesor del actual presidente Andrés Manuel López Obrador, Pemex se quedó con el 44% de la renta petrolera y el 54% restante se le entregó a la Federación para financiar obras y proyectos que abonaran al desarrollo del país.
El mayor contribuyente de México
La entrega de una menor proporción de la renta petrolera al Gobierno por parte de Pemex forma parte de los apoyos fiscales que les ha brindado la Administración del presidente López Obrador, con el fin de apoyarla para sanear sus finanzas y lograr una operación más eficiente, luego de que, según el mandatario, esa empresa del Estado fuera prácticamente saqueada por gobiernos anteriores.
“El propósito de la política neoliberal, neoporfirista, la política privatizadora que impusieron en los últimos 26 años, desde 1983 hasta el 2018, llevaba como objetivo principal desaparecer a Pemex, destruir a Pemex”, acusó López Obrador en julio pasado.
Pese a los apoyos fiscales recibidos y a la entrega de una menor renta petrolera, Pemex sigue posicionado como el mayor contribuyente de México. El 18 de marzo pasado, durante el aniversario de la Expropiación Petrolera, el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, destacó que, en los últimos cinco años, las contribuciones de la paraestatal a las Hacienda pública han triplicado el monto recibido por apoyos fiscales.
“A lo largo de estos cinco años estos apoyos suman 869.000 millones de pesos. Las medidas de carácter fiscal que se han tomado han significado un importante respaldo para fortalecer la situación financiera de Pemex. Aún bajo esta condición, Pemex sigue siendo el mayor contribuyente del país, pues en estos cinco años ha aportado ha aportado a la Hacienda pública un total de 3,8 billones de pesos por concepto de impuestos y derechos”, destacó Romero.
En 2023, Pemex obtuvo ganancias por 109.920 millones de pesos, con lo que sumó dos años con resultados positivos, de acuerdo a la información enviada por la empresa estatal a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
En ese mismo año, según información del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Pemex pagó 332.276 millones de pesos en impuestos (16,613 millones de dólares). Con lo que triplicó su pago de impuestos respecto al 2022, cifra que se ubicó en los 92.186 millones de pesos (4.609,3 millones de dólares).
De acuerdo con el SAT, con lo pagado en el 2023, Pemex contribuyó con 7% del total de los ingresos tributarios del año pasado registrados en 4 billones 517.730 millones de pesos, superando a cinco sectores económicos identificados por el SAT, como por ejemplo el sector de servicios inmobiliarios y de alquiler de bienes muebles y el sector actividades del Gobierno y de organismos internacionales, así como el sector transportes, correos y almacenamiento. Sputnik
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