Río de Janeiro (Brasil).- El incendio forestal que desde el domingo afectaba al Parque Nacional de Brasilia, a las afueras de la capital brasileña, fue controlado por los bomberos la noche del miércoles pero consumió casi 1.500 hectáreas de vegetación, según informó este jueves el estatal Instituto Chico Mendes de la Conservación de la Biodiversidad (ICMBio).
Según este organismo, el fuego consumió un total de “1.473 hectáreas” de vegetación, y el parque sigue bajo vigilancia de los bomberos y los brigadistas para evitar el regreso de las llamas.
El clima seco, con una humedad de entre el 12 y el 20 por ciento, y la sequía que sufre la capital, donde no llueve desde hace 149 días, facilitaron la propagación de las llamas.
La Policía Federal considera que hay indicios de que el fuego, cuya humareda obligó a cancelar las clases en escuelas y universidades durante tres días, fue provocado y abrió una investigación. (Sputnik)
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