El Gobierno de la Ciudad de Monterrey concluyó su ambicioso proyecto de promoción del turismo local y posicionamiento de la marca “Monterrey” con la develación de una escultura gigante de un oso en la zona sur de la ciudad. La obra, ubicada en el camellón de la avenida Lázaro Cárdenas, frente al Parque El Gusanito, en la colonia Del Paseo Residencial, es la última de una serie de instalaciones urbanas diseñadas para acercar el arte y la cultura a la población.
La escultura, denominada “El Residente”, tiene una altura imponente de 10 metros, con 3 metros de ancho y 3 de profundidad. Fue elaborada en resina poliéster y fibra de vidrio, materiales que garantizan su fácil mantenimiento y alta durabilidad. Esta pieza simboliza a las distintas especies de osos que cohabitan en las áreas montañosas cercanas a Monterrey, un ícono de la fauna local.
Este proyecto, impulsado por la Secretaría de Desarrollo Económico y su Dirección Turismo es Cultura, incluyó la instalación de 10 estructuras en varios puntos clave de la ciudad. Entre las obras destacan siete puertas gigantes que representan a diferentes barrios tradicionales de Monterrey, así como dos letreros en tercera dimensión con el nombre de la ciudad. Uno de ellos se encuentra en la Plaza Zaragoza, junto al Palacio Municipal, y el otro en una rotonda sobre Constitución, cerca de la avenida Revolución.
Betsabé Rocha Nieto, Jefa del Gabinete municipal, destacó que estas obras de arte urbano tienen como objetivo principal acercar la cultura a la población y fomentar el turismo en la ciudad. “Hoy estamos rompiendo paradigmas, hoy estamos dejando mitos que pueden ser de orgullo para nuestra ciudad y que muchos puedan disfrutar; ahora esta ciudad tiene mucho que ofrecer”, afirmó Rocha Nieto durante la develación de la escultura del oso.
Además de embellecer la ciudad, estas esculturas buscan generar un atractivo turístico que invite tanto a los locales como a los visitantes a recorrer la ciudad y capturar fotografías en los distintos puntos donde están ubicadas. El Gobierno municipal espera que estas obras contribuyan a resaltar la identidad cultural de Monterrey y a fomentar el orgullo por sus espacios públicos.
Con la instalación de “El Residente” y las demás estructuras, el proyecto llega a su fin, cumpliendo su objetivo de integrar arte, cultura y turismo en la vida cotidiana de Monterrey, lo que convierte a la ciudad en un referente artístico y turístico en el norte de México.
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