Washington.- Los estadounidenses definirán este martes a su futuro presidente entre la candidata demócrata y actual vicepresidenta, Kamala Harris, y el exmandatario republicano Donald Trump (2017-2021), en una reñida contienda que vio a ambos acusarse de ser una “amenaza para la democracia”.
Según una encuesta de la consultora Leger divulgada este lunes, cada candidato tiene el apoyo del 49 por ciento de los posibles votantes.
Más de 78 millones de sufragios ya fueron enviados por correo en un sistema que incluye la votación anticipada, y en el que el presidente se define en el Colegio Electoral y no por el voto popular.
Al último día de campaña, en que los candidatos realizarán varios mítines, se llega en un caldeado ambiente electoral repleto de acusaciones y descalificativos, además de una dura retórica hacia la migración por parte de Trump, quien sufrió dos intentos de asesinato.
El exmandatario, además de insistir en que ganó las elecciones anteriores, se centró en atacar la política migratoria del Gobierno de Joe Biden, alegando que la medida de “frontera abierta” provocó una “invasión” de criminales en EEUU.
En sus actos se ha referido a crímenes cometidos por migrantes indocumentados, que en algunos casos fueron desmentidos, y afirma que llevará a cabo la mayor deportación masiva en la historia del país norteamericano.
Sus burlas y calificativos de comunista y enemiga del país contra Harris, quien tomó la posta en la carrera presidencial luego de que Biden abandonara su intento de reelección, así como contra otros demócratas o autoridades judiciales y la prensa, le dieron un tono violento a la campaña, que polarizó aún más a los votantes.
El exmandatario también afirmó que perseguirá a quienes se le han opuesto, declaraciones por las que fue señalado como un “dictador”, pese a que él se define como un paladín de la libertad de expresión.
En un mitin del domingo, Trump dijo que no le importaría si alguien les dispara a los periodistas.
Si es electo, Trump se convertiría en el presidente de mayor edad, 78 años, en acceder al cargo, y el primero en llegar a la Casa Blanca con una condena judicial en su contra.
Harris, una exfiscal de 60 años, podría convertirse en la primera mujer presidenta de EEUU, si logra superar las preocupaciones económicas y de seguridad de los votantes.
EN LAS ESQUINAS DEL RING
Si bien América Latina no vería una modificación sustancial cualquiera sea el resultado electoral, según los expertos, el destino de los migrantes indocumentados y los solicitantes de asilo sí pueden cambiar drásticamente.
Además de prometer la mayor operación de deportación de la historia, Trump también dijo que terminará de construir el muro en la frontera sur con México, por donde ingresan la mayoría de los migrantes indocumentados, mantendrá detenidos a todas las personas que ingresen ilegalmente y pondrá fin a la ciudadanía automática para niños nacidos en el país cuyos padres no tengan documentación estadounidense.
También prometió limitar el acceso a los pedidos de asilo en la frontera sur y reforzar la política de que los migrantes permanezcan en México mientras se decide su caso.
Harris también mostró una dura propuesta sobre los pedidos de asilo que reforzaría las limitaciones impuestas en el Gobierno actual, que prohíben solicitar protección a quienes ingresen ilegalmente al país, pero propone una “vía ordenada y humana” para lograr la ciudadanía y una ley bipartidista sobre migración.
La candidata demócrata apuntó contra Trump, su compañero de fórmula JD Vance y otros asesores, afirmando que pondrán en práctica el “Proyecto 25”, un documento para un eventual gobierno republicano, del que el expresidente ha intentado distanciarse en algunos temas, que propone radicales medidas conservadores sobre aborto, ambiente y comercio, entre otros.
Aunque en el documento se limita en casi todos los casos el derecho a la interrupción del embarazo, Trump ha dicho que se opone a una prohibición federal de la práctica y que son los estados los que deberá determinar el tema.
Harris prometió buscar una herramienta legislativa para revertir una decisión de 2022 de la Corte Suprema de EEUU que anulaba una decisión de 1973 que legalizó la interrupción del embarazo a nivel nacional.
En materia económica, la propuesta de Harris es elevar impuestos a hogares con ingresos mayores a los 400.000 dólares anuales, mientras que Trump quiere mantener las exoneraciones de tributos para esa franja.
Harris también propone bajar los costos en cuidado infantil, vivienda y alimentación, a la vez que otorgar mayores beneficios económicos por niño nacido.
La candidata demócrata también quiere elevar los impuestos corporativos, pero bajarlos para ganancias menores a un millón de dólares anuales.
Por las propuestas económicas, Trump calificó a Harris de comunista, socialista y querer hacer de EEUU “una nueva Venezuela”.
El exmandatario propone reducir los impuestos corporativos aún más de lo que disminuyeron bajo su mandato, duplicar los gravámenes para bienes importados y aumentar los impuestos a China.
En cuanto a política exterior, Trump propone una paz negociada entre Ucrania y Rusia para poner fin al conflicto territorial entre ambos, pero se opone a enviar más dinero como ayuda; apoya a Israel en su guerra contra el movimiento palestino Hamás y no quiere que EEUU se involucre en otros conflictos armados.
Harris, por su parte, respalda continuar con el apoyo a Ucrania, y aunque no se refirió a retirar el respaldo a Israel, ha pedido el fin de los ataques contra Gaza, que se han cobrado miles de vidas desde octubre de 2023.
En los comicios del martes también se elige vicepresidente, los 435 escaños de la Cámara de Representantes, un tercio del Senado, (34 bancas), 13 gobernaciones y otras autoridades estaduales; además de decidir en 159 iniciativas en 41 estados, entre ellas sobre el aborto y la legalización de la marihuana.
Otros dos candidatos aspiran a la presidencia: Jill Stein, por el partido Verde, y Cornel West, como independiente.
Además de la incertidumbre sobre quién será el próximo residente de la Casa Blanca a partir del 20 de enero de 2025, también existen temores de si Trump aceptaría una derrota o si se repetirá lo sucedido en enero de 2021, cuando acusó a las autoridades electorales de fraude e incitó a sus seguidores a tomar el Congreso antes de dejar la presidencia. (Sputnik)
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