En un acto que subraya su compromiso con la economía de los ciudadanos, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, anunció este miércoles el veto al aumento del impuesto predial propuesto por el municipio de Monterrey.
Este incremento, inicialmente señalado como un 30%, fue calificado por el mandatario como un “atraco” que impactaría desproporcionadamente a las familias regiomontanas, especialmente en un contexto económico ya de por sí complicado.
El veto representa una victoria para los habitantes de Monterrey que hubieran enfrentado una carga fiscal insostenible. Según explicó el gobernador, mientras que el aumento generalizado se calculaba en un 30%, en algunas zonas vulnerables el incremento alcanzaba cifras exorbitantes, como en la colonia Los Nogales, donde el predial podría haber pasado de 150 pesos en 2024 a 3,000 pesos en 2025, un alza de 1,500%.
Un golpe evitado a la economía familiar
Samuel García señaló que su administración no incluyó en su paquete fiscal ninguna propuesta para aumentar o crear nuevos impuestos, reconociendo las dificultades económicas que enfrenta el país. “No puedo permitir que suba al doble o al triple el predial, especialmente en un año que se perfila como complicado por factores externos como el panorama federal y las tensiones económicas en Estados Unidos,” enfatizó el mandatario.
Responsabilidad en la gestión fiscal
La decisión de vetar este aumento no solo protege a los regiomontanos de una medida fiscal desproporcionada, sino que también resalta la necesidad de una gestión pública más responsable y empática. Propuestas de este tipo, aunque justificadas en la necesidad de recaudar más ingresos municipales, deben ser cuidadosamente analizadas para evitar que se conviertan en cargas desmedidas para los sectores más vulnerables.
Un mensaje claro
Este veto es un mensaje contundente de que la administración estatal prioriza el bienestar de sus ciudadanos sobre cualquier afán recaudatorio. Es una invitación a las autoridades municipales a replantear sus estrategias de financiamiento, considerando el impacto real en la calidad de vida de las personas que representan.
Reflexión y Acción
El caso del aumento del predial en Monterrey debe ser una lección para todos los niveles de gobierno. Es imprescindible que las decisiones fiscales sean transparentes, equitativas y sensibles al contexto económico de las comunidades. Este episodio deja claro que los ciudadanos necesitan representantes que velen por sus intereses y trabajen con responsabilidad para construir un entorno económico más justo.
Con esta acción, Samuel García no solo rechaza un aumento desmedido, sino que reafirma su compromiso con la estabilidad económica de Nuevo León, enviando un mensaje de esperanza a las familias que buscan en su gobierno un aliado frente a los retos que enfrentan.
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