By Redacción ATP en Español
A pesar de pertenecer a distintas generaciones, Novak Djokovic y Carlos Alcaraz han conseguido convertir su rivalidad en el gran clásico moderno del Grand Slam. La formidable longevidad del serbio y una irrupción vertiginosa del español hasta la cima del circuito han generado una realidad inevitable: choques máximos por los mayores trofeos del calendario. Este martes en Melbourne Park escribirán la cuarta entrega de un historial repleto de momentos icónicos, grabados para siempre en la historia del deporte.
Desde la tierra batida hasta la superficie dura, pasando por dos capítulos inmensos sobre hierba, ambos han logrado llevarse al límite con una manera común de entender el deporte: la excelencia en cada golpe para dominar los templos del tenis.
Roland Garros 2023: el bautismo
La arcilla de Roland Garros sirvió como escenario para abrir su historial en los majors, en una temporada 2023 donde Alcaraz ya había tomado el trono del ATP Tour. En su primera escalada hasta las semifinales del Grand Slam parisino, toda una declaración de intenciones en un evento especial, el murciano parecía dispuesto a tomar el relevo y extender el enorme legado de Rafael Nadal en la capital francesa. Sin el mallorquín en el cuadro principal, Carlos asumió el liderazgo de La Armada camino de las rondas definitivas.
En las semifinales afrontó un desafío sin precedente en toda su carrera: batirse a cinco mangas con Djokovic en un torneo de Grand Slam. Aquella experiencia, tan dolorosa como útil a futuro en su carrera, mostró al murciano el precio de unos partidos reservados a las leyendas del deporte. Tras batallar durante dos intensas mangas, una dolencia abdominal le privó de competir por acceder a su primera final en Roland Garros, torneo que terminaría coronando un año más tarde. Limitado físicamente para conectar golpes clave, con un servicio absolutamente derruido, Alcaraz se obligó a competir hasta el final del partido. Apenas pudo ganar dos juegos en las últimas dos mangas, pero tomó nota de la experiencia vivida en un partido obligatorio hacia la gloria en su carrera.
Djokovic terminó prevaleciendo (6-3, 5-7, 6-1, 6-1) camino de una final que supondría su tercera corona en el Grand Slam de la arcilla.
Wimbledon 2023: la respuesta
La lección fue aprendida a toda velocidad por Alcaraz, que no tardó en devolver un sonoro golpe en la rivalidad. Apenas unas semanas después, sobre la hierba de Wimbledon, el español consumó un hito con aroma a cambio de guarda. En un partido de leyenda, Carlos resistió durante cinco mangas (1-6, 7-6, 6-1, 3-6, 6-4) para arrebatar el trono del All England Club a Djokovic, terminando con una hegemonía de cuatro ediciones consecutivas del balcánico. El partido demostró la valentía del murciano en su primera final londinense, una resistencia física total tras el traspié de París y una capacidad para mantener la mirada al gran dominador reciente del torneo. Si ese partido, la batalla más blindada de los últimos tiempos, no le hizo pestañear, ¿qué podría hacerlo en un futuro?
Wimbledon 2024: la consagración
La oportunidad de responder a esa pregunta llegó un año después con el mismo escenario como testigo. La Centre Court de Londres tuvo la oportunidad de revivir el partido definitivo en dos ediciones consecutivas, una realidad reservada a los miembros del Big Three en este siglo. Con una serenidad fuera de lo común, Alcaraz consiguió sentarse en esa mesa. Por si fuera poco, firmando un registro nunca antes visto.
Nadie había conseguido derrotar a Novak en múltiples finales con la copa dorada de Londres en juego. Esa posibilidad espoleó los golpes de Alcaraz, capaz de abrirse paso hasta el trono sin entregar una sola manga (6-2, 6-2, 7-6(4) ante el tenista de Belgrado. Un partido colosal al servicio del español, entregando apenas una rotura ante uno de los mejores retadores de la historia, confirmó su capacidad para elevar el nivel en los partidos más trascendentes del deporte. Las diferencias marcadas ante Novak, nunca antes vistas en una final de Wimbledon, consagraron su dominio vestido de blanco. El triunfo del murciano en Londres, convertido ya en tetracampeón de Grand Slam, supuso la confirmación de una nueva era en los mayores escenarios del circuito.
Abierto de Australia 2025: la última frontera
El choque de este martes en Melbourne opondrá dos fuerzas inmensas en la zona alta del vestuario. A sus 37 años, Djokovic intentará proteger el mayor feudo histórico de su carrera, una Rod Laver Arena que lo ha convertido en leyenda del deporte. El 10 veces campeón intentará recuperar un trono que le fue arrebatado un año atrás por el empuje de Jannik Sinner, el otro gran perfil joven vestido de rey en el vestuario.
Para Alcaraz, que busca completar la colección del Grand Slam y confirmar su dimensión histórica en el deporte, será la oportunidad de asestar un golpe decisivo en su cara a cara con el serbio. El murciano, que nunca ganó a Djokovic en superficie dura, tendrá a su disposición un escenario repleto de significado para buscar un triunfo memorable. Nadie ha logrado sobrevivir como Novak en el Grand Slam australiano, pero muy pocos han llegado a los grandes con la fuerza de Carlos. Aunque la lucha por el trofeo quede a dos pasos de distancia, un capítulo inolvidable para ambos.
Fuente: https://www.atptour.com/
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