La industria manufacturera de Nuevo León cerró 2024 con un desempeño económico debilitado, marcado por una contracción en varios de sus principales indicadores, según reveló la encuesta de expectativas económicas correspondiente a diciembre. Este retroceso refleja tanto factores estacionales como condiciones estructurales que afectan la productividad del sector.
Indicadores clave en contracción
En diciembre, los “nuevos pedidos” alcanzaron 39.78 puntos, su nivel más bajo desde mayo de 2020 y por debajo de la línea de expansión. El “volumen físico de producción” no fue la excepción, registrando 42.27 puntos, mientras que la “capacidad utilizada” también permaneció en contracción, con 46.1 puntos.
El comercio exterior enfrentó una situación similar, con reducciones en exportaciones e importaciones que cerraron en 41.6 y 45.6 puntos, respectivamente. En cuanto al empleo, el índice de contrataciones reflejó una baja actividad, al marcar 47.1 puntos.
Factores que frenaron el desempeño
Los empresarios señalaron diversas barreras que obstaculizaron su desempeño. Entre ellas, el “panorama político” se posicionó como el principal desafío, con un 42.45% de las respuestas, un incremento de 8.5 puntos porcentuales respecto a noviembre.
Otros factores destacados incluyen una “actividad económica débil” (36.4%) y una “menor demanda externa” (28%). La “escasez de personal capacitado” continúa siendo un obstáculo relevante, señalado por el 28.8% de los encuestados.
Además, la proporción de empresas que invirtió en construcción, maquinaria y equipo registró su tercera cifra más baja del año, con solo un 28% reportando inversiones en diciembre.
Presión en precios contrasta con contracción
A diferencia de la caída en producción, los indicadores de precios se mantuvieron al alza. El índice de “precios de materias primas” cerró el mes en 58.17 puntos, reflejando las presiones inflacionarias persistentes en el sector.
Factores estacionales y retos a largo plazo
Aunque diciembre suele ser un mes de menor actividad productiva debido a factores estacionales, los resultados evidencian problemas más profundos que requieren atención. La combinación de incertidumbre política, falta de personal calificado y una demanda externa debilitada plantea retos significativos para la industria manufacturera en Nuevo León.
Con estos resultados, el sector se enfrenta a un escenario complejo en el arranque de 2025, donde la recuperación dependerá de medidas estructurales que impulsen la competitividad y mitiguen los factores que frenan el crecimiento económico.
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