México ante la presión de Trump: ¿seguirá el ejemplo de Canadá?
Canadá ya hizo su jugada. Justin Trudeau, en un movimiento calculado para apaciguar las exigencias de Donald Trump, nombró a Kevin Brosseau como el primer “zar del fentanilo”, un paso estratégico que no solo busca combatir el tráfico de esta droga, sino también calmar la retórica incendiaria del presidente estadounidense. Mientras tanto, en México, el silencio es ensordecedor.
Trump no ha ocultado su frustración. Para él, los principales culpables de la crisis del fentanilo en Estados Unidos son China, México y Canadá. Y aunque el nombramiento de Brosseau no resolverá el problema de la noche a la mañana, sí le da a Canadá una ventaja diplomática clave: el beneficio de la duda. ¿Y México?
Hasta ahora, la administración de Claudia Sheinbaum no ha dado señales de un plan concreto para enfrentar el tráfico de fentanilo con la misma contundencia. ¿Nombrará México a su propio “zar del fentanilo”? ¿O seguirá insistiendo en que el problema es solo del otro lado de la frontera? Mientras tanto, Washington sigue reforzando su presencia militar cerca de nuestras aguas, con portaviones y aviones espías que envían un mensaje claro: la paciencia de Estados Unidos se agota.
El gobierno mexicano debe actuar antes de que las presiones se conviertan en medidas unilaterales por parte de Estados Unidos. Más allá de los discursos y la diplomacia, lo que Trump y su base quieren ver son resultados tangibles. Si México no toma la iniciativa pronto, corre el riesgo de que la narrativa impuesta desde Washington termine por costarle caro en términos de soberanía y relaciones bilaterales.
El primer paso ya lo dio Canadá. La pregunta ahora es: ¿qué hará México? Por lo pronto, por más que nuestros generales digan que no han existido incursiones aéreas de los Estados Unidos hacia México, una de las cadenas más importantes del otro lado de la frontera hoy habla de al menos 18 incursiones. ¿usted qué cree?
Aguas…de una vez se los digo.
