Montevideo (Mesa Américas).- El riesgo de que Puerto Príncipe caiga bajo el control de las bandas armadas es tangible, alertó este martes el experto de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en Haití, William O’Neill, tras su cuarta visita a la nación caribeña en dos años.
“Esta breve estancia me ha permitido evaluar la situación, no sólo su gravedad, sino también, y sobre todo, el dolor y la desesperación de toda una población. El sufrimiento impregna todos los estratos sociales, especialmente a los más vulnerables. A pesar de los esfuerzos de la Policía Nacional Haitiana (PNH) y de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), el riesgo de que la capital caiga bajo el control de las bandas es palpable”, dijo el experto.
O’Neill añadió que la violencia de las pandillas se consolida y extiende más allá de la capital
“Matan, violan, aterrorizan, incendian hogares, orfanatos, escuelas, hospitales, lugares de culto, reclutan niños y se infiltran en todas las esferas de la sociedad. Todo ello, con la mayor impunidad y a veces, como señalan muchas fuentes, con la complicidad de actores poderosos”, precisó.
El experto de ONU dijo que la violencia ha desplazado internamente a más de un millón de personas, miles de ellos tan solo en las últimas semanas.
“No tienen adónde ir. Hace poco, unos estudiantes arrojaron piedras a unos desplazados que intentaban ocupar su escuela. Los desesperados se vuelven contra los más desesperados. En los campamentos improvisados, el hambre y la violencia sexual están muy extendidos. Para muchos, es una cuestión de supervivencia”, relató.
En ese sentido, señaló que “la unidad y la solidaridad deben guiar la acción política a todos los niveles, en interés de la población”.
Asimismo, llamó al Estado haitiano a hacer de la lucha contra la impunidad y la corrupción una prioridad, debido a que son un obstáculo para el desmantelamiento de las bandas.
“La lucha contra las bandas debe llevarse a cabo respetando estrictamente el derecho internacional relativo a los derechos humanos, en particular el derecho a la vida. Ninguna circunstancia, por excepcional que sea, puede justificar la violación de este derecho fundamental”, añadió.
A su vez, llamó a la comunidad internacional a “actuar sin demora para poner en práctica los compromisos que ha asumido, en particular en lo que respecta al régimen de sanciones, el embargo de armas y el refuerzo sustancial del apoyo multinacional a la seguridad, respetando el derecho internacional de los derechos humanos”.
El experto concluyó su mensaje afirmando que no hay tiempo que perder, ya que “la supervivencia de Haití está en juego”.
Haití vive una crisis de inseguridad y gobernanza exacerbada tras el magnicidio del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021.
Se estima que en el último año la violencia de las pandillas causó 5.600 muertes y más de 5,5 millones personas requieren asistencia humanitaria urgente. (Sputnik)
Fuente: https://noticiaslatam.lat/
Foto: redes sociales-Haití
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