El coordinador parlamentario de Movimiento Ciudadano en el Congreso de Nuevo León, Miguel Ángel Flores Serna, respaldó con matices las iniciativas federales para reducir el consumo de alimentos ultraprocesados en planteles educativos, aunque pidió evaluar cuidadosamente su implementación.
“Definitivamente beneficia la salud infantil, pero debemos garantizar que no afecte la economía familiar”, señaló el legislador, quien advirtió sobre la necesidad de evitar medidas demasiado complejas o costosas para los padres de familia. Flores Serna destacó la importancia de acompañar estas políticas con campañas informativas y opciones accesibles de alimentación saludable.
El diputado local enfatizó la urgencia de crear alternativas reales para todos los sectores sociales: “No basta con restringir, debemos ofrecer soluciones viables que permitan a cada familia, sin importar su condición económica, acceder a una nutrición adecuada”. Asimismo, planteó la necesidad de apoyar a los comerciantes escolares en su transición hacia productos más sanos.
Mientras el gobierno federal avanza en la regulación de alimentos chatarra, Flores Serna insistió en que cualquier medida aplicada en Nuevo León debe considerar cuidadosamente sus impactos sociales y económicos, buscando siempre el equilibrio entre salud pública y realidad familiar.
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