La realidad que desmiente a Trump: economía en riesgo y treguas inexistentes
Mientras desde Washington se trazan discursos para justificar la deportación masiva de inmigrantes, un estudio elaborado por la Universidad de California en Merced expone una verdad que contradice el discurso oficial: lejos de ser una carga, los trabajadores indocumentados son fundamentales para la estabilidad económica de California. La expulsión de esta fuerza laboral, impulsada por la administración de Donald Trump, provocaría pérdidas de hasta 275 mil millones de dólares para el estado fronterizo con México.
El estudio, presentado por la Universidad de California en Merced, advierte que California también dejaría de percibir alrededor de 23 mil millones de dólares anuales en ingresos fiscales si la comunidad migrante fuera eliminada. “Estas pérdidas subrayan el importante papel que desempeñan los trabajadores indocumentados en el sostenimiento de la producción económica en las comunidades e industrias de California”, señala la institución. Además, advierte que sin estas contribuciones, el estado caería dos posiciones en el ranking de las economías más fuertes a nivel mundial.
El impacto sería profundo y de largo alcance. Según la investigación, la eliminación de la fuerza laboral inmigrante provocaría directamente una pérdida de casi 153 mil millones de dólares en salarios y valor de producción. Al sumar los efectos indirectos, como la interrupción de las cadenas de suministro y la reducción en la actividad comercial, las pérdidas podrían superar los 212 mil millones. La narrativa gubernamental, que insiste en los beneficios de las deportaciones masivas, queda desmentida por las cifras presentadas por la propia universidad californiana.
Mientras Trump insiste en construir verdades desde el micrófono, sus intentos de mostrarse como pacificador internacional tampoco encuentran respaldo. Este fue el caso de la supuesta tregua entre Israel e Irán. Poco después de que el presidente estadounidense anunciara un alto al fuego, el ministro iraní Seyed Abbas Araqchi salió al paso para desmentirlo: “Por el momento NO hay ‘acuerdo’ para un alto el fuego o cese de las operaciones militares”, publicó con claridad en sus redes sociales.
El funcionario iraní fue contundente al precisar que, si Israel no detenía sus ataques antes de las 4:00 horas, tiempo de Teherán, Irán continuaría con su respuesta militar. Lo que Trump presentó como un avance diplomático quedó reducido a un anuncio sin sustento, mientras las tensiones en la región siguen escalando.
Ni en la política migratoria ni en los acuerdos internacionales las versiones de Trump logran sostenerse frente a los hechos. La distancia entre los discursos y la realidad es cada vez más evidente. Y en ambos frentes, los datos y las voces oficiales terminan por desnudar esas verdades a medias.
PD: Los datos de la encuesta fueron tomados de nuestra agencia informativa : SPUTNIK
