
La diputada María de los Ángeles Ballesteros García propuso una iniciativa que busca poner fin a los cobros excesivos por cambios de nombre en boletos de avión y permitir que los pasajeros puedan transferir sus boletos a otra persona sin costo adicional.
Ballesteros planteó que los pasajeros deberían tener la opción de modificar parcial o totalmente el nombre del titular del boleto hasta seis horas antes del vuelo, ya sea en ventanilla o a través de plataformas digitales, sin que esto genere ningún cargo extra.
Además, la iniciativa propone que los boletos puedan transferirse libremente a terceras personas, siempre y cuando la solicitud se realice con al menos seis horas de anticipación al abordaje. Las aerolíneas estarían obligadas a ofrecer canales sencillos, accesibles y sin costos ocultos para realizar este trámite.
La diputada advirtió que, en caso de incumplimiento, las aerolíneas enfrentarían sanciones equivalentes al costo total del boleto, además de estar obligadas a cubrir los gastos derivados de la imposibilidad del pasajero para abordar el vuelo en la fecha original. Esto incluiría tarifas de reprogramación, gastos administrativos y cualquier otro cargo relacionado.
“El objetivo es garantizar eficiencia, equidad y accesibilidad en el transporte aéreo en México. Las aerolíneas deben dejar de imponer tarifas arbitrarias que solo protegen sus ganancias y afectan directamente a los usuarios”, explicó Ballesteros García.
En México, este tipo de cobros ha sido motivo de críticas constantes debido a su falta de regulación clara. Las aerolíneas suelen justificar estos costos argumentando supuestos gastos administrativos, aunque la mayoría de los boletos hoy son digitales y las modificaciones no representan costos operativos significativos.
Ballesteros subrayó que este problema afecta especialmente a pasajeros que necesitan ajustar sus viajes por motivos laborales o emergencias, y en muchos casos, el costo del cambio de nombre supera el precio de un boleto nuevo.
La propuesta fue turnada a la Comisión de Comunicaciones y Transportes para su análisis y, de aprobarse, la Procuraduría Federal del Consumidor y la Agencia Federal de Aviación Civil serían responsables de supervisar que las aerolíneas cumplan con la nueva disposición.
La legisladora consideró que esta reforma es urgente para evitar que las prácticas abusivas sigan afectando la movilidad de las personas y para actualizar la ley conforme a las condiciones tecnológicas actuales.
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