En pleno Día del Abogado y ante una sala colmada de juristas, el gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, aprovechó el reconocimiento que le entregó el Colegio de Abogados del estado para lanzar un mensaje claro: la reforma judicial que se avecina no será un remedo del modelo federal.
“Nuevo León no merece un copy paste de lo que pasó a nivel federal. Nuevo León es mucha pieza para un copy paste”, afirmó, con su ya característico tono retador. Y fue más allá: “Tenemos hoy la oportunidad real de imaginar la mejor reforma posible”, declaró ante los presentes en la Asamblea General Ordinaria del Colegio, celebrada como parte de la conmemoración anual.
Durante el acto, el presidente rector del Colegio, David Rodríguez Calderón, entregó al gobernador un reconocimiento por su apoyo incondicional al fortalecimiento del órgano colegiado. También fue distinguido el secretario general de Gobierno, Miguel Ángel Flores Serna, por su labor como funcionario público.
García aprovechó la ocasión para convocar a todos los actores del ámbito jurídico a participar en la construcción de una reforma que redefina el Poder Judicial estatal rumbo a 2027. “Qué mejor momento que celebrando el Día del Abogado para que sean los abogados los que vayan a redactar esa reforma que le va a dar vida al Poder Judicial de Nuevo León”, señaló.
Abogados litigantes, catedráticos, estudiantes, fiscales, legisladores y asociaciones profesionales, todos fueron llamados a ser parte activa de este proceso. “Todos juntos podemos sacar una gran reforma y mostrarle al país por qué somos el mejor estado de México”, remató el gobernador.
El evento también sirvió para entregar la Presea “Un Hombre Abogado. Lic. Ricardo A. Ayala Villarreal” a 19 juristas destacados y tomar protesta a los nuevos miembros del Colegio de Abogados, así como a los integrantes de la Comisión de Jóvenes Postulantes.
La ceremonia fue acompañada por funcionarios de todos los niveles de gobierno, legisladores y representantes de la Fiscalía General de Justicia. En un ambiente de celebración y compromiso, el mensaje fue claro: la justicia en Nuevo León tiene que renovarse, pero con sello propio.
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