Javier Benitez
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, declaró que no aceptará el establecimiento de un Estado palestino plenamente soberano, ni la consiguiente transferencia de poderes clave, en particular, en materia de seguridad. Lo manifestó en su reciente visita a EEUU donde mantuvo una reunión con el presidente, Donald Trump.
¿Violación del derecho internacional?
Al ser consultado acerca de su postura sobre la viabilidad de una solución de dos Estados para el conflicto de Oriente Medio, Netanyahu respondió: “Creo que los palestinos deberían tener todos los poderes para gobernarse a sí mismos, pero ninguno de los poderes que nos amenace [a Israel]. Eso significa que ciertas competencias, como la seguridad general, siempre estarán en nuestras manos”.
“Eso es un hecho. Y nadie en Israel aceptará otra cosa porque no nos suicidamos. Construiremos una paz en la que nuestra seguridad, la soberanía de la seguridad, siempre esté en nuestras manos. Ahora, la gente dirá que no es un Estado completo. ‘No es un Estado. No es eso’. Nos da igual”, espetó el premier israelí.
Por su parte, Trump hizo ‘la gran’ Poncio Pilato: se lavó las manos. Cuando la prensa le preguntó sobre la posibilidad de resolver el conflicto palestino-israelí mediante una solución de dos Estados, respondió con desdén: “No lo sé. Pregúntenle eso a Bibi [Benjamin Netanyahu]”.
“Lo que quiere Netanyahu es muy simple. Quiere una autonomía tutelada, que los palestinos sigan siendo y constituyéndose en la mano de obra barata de un Estado que los oprime en todos los aspectos: social, económica, política y territorialmente. Lo que quiere Netanyahu ahí es simplemente lo mismo, pero con un poquito más de autonomía. Porque lo que él está planteando ya lo tiene con la Autoridad Nacional Palestina, con lo que hay ahí. Entonces me parece extraño que él ahora se esté planteando esto. Vale decir, lo que él quiere, en el fondo, es que la resistencia palestina se rinda y que el pueblo palestino le dé en bandeja lo que él [Netanyahu] quiere para el futuro”, explica el analista internacional Nicola Hadwa.
Fuente: https://noticiaslatam.lat/
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