
La diputada local de Movimiento Ciudadano, Melissa Peña, presentó una iniciativa para reformar la Ley Federal del Trabajo y permitir que madres, padres o tutores puedan llevar a sus hijos menores de edad a su centro laboral en situaciones excepcionales.
De acuerdo con la legisladora, la propuesta busca aliviar la carga de cuidados que, en la mayoría de los casos, recae en las mujeres, además de reducir el ausentismo y mejorar el bienestar de las familias.
La reforma plantea que esta medida solo se aplique bajo condiciones que garanticen la seguridad de los menores y sin afectar la productividad del centro de trabajo. Entre los requisitos se incluye pedir autorización previa al empleador, supervisión constante del menor, restringir el acceso a zonas de riesgo y prohibir su presencia en caso de enfermedad contagiosa.
Peña destacó que esta iniciativa se sustenta en el interés superior de la niñez y en principios de igualdad y no discriminación, fomentando entornos laborales más inclusivos. Agregó que países como Estados Unidos, Francia y Canadá han implementado políticas similares con resultados positivos en productividad y bienestar laboral.
Además, durante la misma sesión, la diputada presentó un exhorto al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT) para que, junto con municipios del área metropolitana de Monterrey y su periferia, realice un censo actualizado de viviendas abandonadas y ponga en marcha un programa de recuperación urbana.
Según cifras del INEGI, entre el 15 y el 20 por ciento de las viviendas en Nuevo León están desocupadas. En el caso de las administradas por INFONAVIT, cerca del 31 por ciento corresponden a cartera vencida, mientras que muchas otras permanecen vacías aun cuando sus dueños siguen pagando el crédito. Aproximadamente el 80 por ciento han sido ocupadas de manera irregular.
La legisladora advirtió que este problema impacta directamente en la seguridad, la economía y la calidad de vida, pues las casas abandonadas se convierten en puntos de inseguridad, vandalismo y deterioro urbano.
“Estas casas pueden y deben volver a ser hogares para las familias que las necesiten. Es una oportunidad para mejorar la imagen urbana, reducir los focos de inseguridad y fortalecer el tejido social”, expresó Peña.
Por: Michelle Cabrera-Eitmedia.mx