El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, destacaron un momento inédito en la relación bilateral tras la reunión que sostuvieron en Palacio Nacional con la presidenta Claudia Sheinbaum.
En conferencia de prensa desde la Secretaría de Relaciones Exteriores, Rubio aseguró que nunca antes había existido un nivel de cooperación tan alto en materia de seguridad. “Se ha logrado un nivel de cooperación histórico (…), jamás en la historia de ambos países ha habido el nivel de cooperación que existe en este momento”, afirmó en su primera visita oficial a México.
El funcionario estadounidense subrayó que “los cárteles son una amenaza a la seguridad nacional de México y Estados Unidos, y por eso tiene toda la lógica cooperar y trabajar en conjunto”. También reconoció la entrega de 59 criminales de alto perfil por parte del gobierno mexicano, quienes enfrentaban cargos por narcotráfico en cortes estadounidenses.
De la Fuente, por su parte, precisó que el acuerdo alcanzado incluye “cooperar y proteger a nuestras comunidades para que estén más seguras”, siempre dentro de los marcos jurídicos de cada país. Puntualizó además que la colaboración no contempla la presencia de fuerzas armadas estadounidenses en territorio mexicano.
El jefe de la diplomacia de Washington respaldó esa postura al señalar que la cooperación en seguridad “respeta la integridad (territorial), la soberanía de ambos países”.
Ambos gobiernos formalizaron un protocolo que amplía la colaboración en el combate al narcotráfico, el contrabando de armas hacia México y el intercambio de inteligencia para enfrentar al crimen organizado transnacional.
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