Los diputados federales del PRI condenaron el retiro de la presidencia de la Comisión de Marina a su bancada en el Senado, al que calificaron de “alevoso” y como una muestra más de las prácticas autoritarias de Morena.
En un pronunciamiento conjunto, los 37 legisladores priistas, encabezados por su coordinador Rubén Moreira Valdez, expresaron respaldo a la dirigencia nacional de su partido, Alejandro Moreno y Carolina Viggiano, así como a los senadores priistas afectados por la decisión.
Los legisladores advirtieron que esta acción representa un “atropello contra la democracia y la pluralidad” del Congreso, al considerar que Morena busca imponer una ruta que conduce a un régimen dictatorial. Recordaron que la pluralidad parlamentaria refleja la diversidad política del país, por lo que, dijeron, resulta inaceptable vulnerarla.
“Resulta inaceptable que Morena, como ya lo hizo en la Cámara de Diputados al apropiarse de manera facciosa del 75 por ciento de las curules, ahora arrebate también una Comisión que no le corresponde”, señalaron en su posicionamiento.
El grupo parlamentario aseguró que continuará denunciando lo que considera abusos de poder, destrucción de instituciones y cierre de espacios de participación a quienes no comparten los intereses de la mayoría oficialista.
“El PRI no permitirá que se normalice el abuso de poder ni que se anule la voz de la oposición. Defenderemos la democracia, las instituciones y la pluralidad política que le dan sustento a la República”, concluyeron los diputados.
