La clausura del Parque La Pastora por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha sido calificada como arbitraria por el presidente ejecutivo de Parque Fundidora, Bernardo Bichara Assad. La medida mantiene cerrado este espacio de entretenimiento familiar y ha generado un conflicto sobre el manejo de los animales resguardados en sus instalaciones.
Bichara Assad informó que el parque interpondrá mañana un amparo para revertir la clausura y permitir la reapertura del sitio, con el objetivo de que los ciudadanos de Nuevo León continúen disfrutando de sus instalaciones. El Consejo del Parque Fundidora instruyó a las áreas jurídica y administrativa a presentar todos los recursos legales necesarios para impugnar la medida, la cual calificaron de irregular y politizada.
El directivo recordó que actualmente el parque tiene bajo su cuidado 91 animales enviados por la Profepa, además de 500 que forman parte del patrimonio propio de La Pastora. Ante la clausura, se decidió suspender la recepción de nuevas especies enviadas por la dependencia federal y se evalúa la posibilidad de devolver los ejemplares que ya están bajo resguardo.
Bichara Assad enfatizó que el parque ha colaborado con la autoridad en casos aislados, como el de la osa Mina, pero acusó que dicha colaboración no ha sido recíproca y ha estado sujeta a intereses políticos, lo que motivó la decisión de presentar acciones legales.
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