José Luis Garza Ochoa, diputado federal y presidente estatal del PRI, informó que ya ha pedido licencia a ambos cargos, para poder contender próximamente por la Presidencia Municipal de Guadalupe.
Al medio día, el precandidato hizo su anuncio frente a simpatizantes, en la Plaza Municipal de Guadalupe. Esto, a pesar de que, actualmente, el proceso electoral se encuentra en periodo de intercampañas.
“Les he convocado para anunciar que he pedido licencia (…) para registrarme como candidato a la Presidencia Municipal de este querido Guadalupe”, dijo.
“PRI, PAN y PRD competiremos juntos por Guadalupe y daremos vida, en nuestro municipio, a la coalición que hoy encabeza nuestra candidata (presidencial) Xóchitl Gálvez”, agregó.
La ausencia de Garza Ochoa en la Cámara de Diputados será cubierta por el abogado pesqueriense Jorge Cortés. Como líder del PRI en Nuevo León se quedará, mientras tanto, Diego Garay.
Guadalupe no se hereda
Durante su intervención, Garza Ochoa aprovechó para criticar que la actual alcaldesa –también priista– Cristina Díaz esté apoyando las aspiraciones políticas de su hijo, el ahora morenista Tomás Montoya, quien también busca gobernar Guadalupe.
“Se equivocan quienes piensan que Guadalupe es un botín político que puede pasarse entre parientes”, expresó, sin mencionar como tal a la edil, pero subrayando que “Guadalupe no se hereda”.
De igual forma, arremetió contra Montoya sin pronunciar su nombre, pero señalando como traición que haya abandonado la militancia tricolor para unirse a la guinda.
“Hace no mucho, mis rivales en la contienda se decían priistas de hueso colorado (…). ¿Con qué cara se presentan a pedir el voto ciudadano si, a la primera que sus ambiciones no fueron satisfechas, se fueron del barco?”.
Por: Paula Román – eitmedia.mx