Quito.- Ecuador defendió este miércoles ante la Corte internacional de Justicia (CIJ) de La Haya que la irrupción de la fuerza pública ecuatoriana en la embajada de México en Quito el pasado 5 de abril fue “un incidente aislado” que tuvo lugar debido a que el país norteño utilizó su sede diplomática con fines indebidos.
“El incidente aislado del 5 de abril fue solo eso”, dijo el Agente de Ecuador enviado ante la CIJ, embajador Andrés Terán en la audiencia realizada tras la denuncia presentada por el gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, luego de los incidentes registrados en su legación diplomática para capturar al exvicepresidente Jorge Glas (2012-2018), quien había recibido el asilo político solicitado a ese país un día antes de los hechos violentos.
“La razón por la que los hechos del 5 de abril fueron excepcionales y hoy ya no existen es muy sencilla, México utilizó indebidamente durante meses su sede diplomática en Quito para dar cobija a un delincuente común que había sido debidamente condenado en dos ocasiones por los más altos tribunales ecuatorianos por delitos muy graves relacionados con la corrupción, y estaba sujeto a procesos en curso relativos a más delitos de corrupción y de otra índole”, aseveró.
En su intervención, Terán expresó que Ecuador sigue abierto a reunirse con México para discutir este asunto, “que ya es pasado”, y añadió que no hay hechos excepcionales o circunstancias de clases que requieren que el tribunal ordene medidas provisionales.
Respecto a la denuncia presentada contra México por parte del gobierno de Ecuador ante la CIJ, el pasado 29 de abril, señaló que es objeto de un litigio separado y se refiere “entre otras cosas a las violaciones por parte de México de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, la necesidad de prevenir el abuso de la institución del asilo tal y como la conoce América Latina y el desconocimiento total por parte de México de sus obligaciones de cooperar en el marco de la Convención Interamericana y de la ONU contra la Corrupción, y por la flagrante injerencia de México en los asuntos internos del Ecuador,”.
Además, ratificó las palabras del presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, donde expresó a México que siempre estará dispuesto a resolver cualquier diferencia entre los dos países, pero “la justicia no es negociable” y por ello Ecuador jamás protegería a delincuentes que hayan dañado a mexicanos.
México ha solicitado medidas provisionales contra Ecuador ante la CIJ como su suspensión como miembro de la ONU hasta tanto no se disculpe por esta irrupción en su sede diplomática y la reparación de los daños por la violación al derecho internacional.
El equipo de abogados de México solicitó plena protección y seguridad de las instalaciones diplomáticas, su propiedad y archivos, previniendo cualquier forma de intrusión contra estos documentos.
Sobre el tema, la canciller ecuatoriana, Gabriela Sommerfeld, señaló en Quito, durante una entrevista con la emisora local Radio Democracia, este miércoles, que en una nota verbal ya fueron establecidas que estas medidas de forma unilateral desde Ecuador, en cumplimiento a la Convención de Viena.
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