Moscú.- Irán celebra este viernes los comicios presidenciales anticipados, cuarenta días después de la trágica muerte del presidente Ebrahim Raisi (1960-2024) en un accidente de helicóptero del pasado 19 de mayo.
De acuerdo con la Constitución de la República Islámica de Irán, el presidente es el segundo funcionario más alto después del líder supremo. En caso de muerte o incapacidad del presidente, sus funciones son traspasadas al primer vicepresidente hasta la elección de un nuevo líder, lo que debe tener lugar en un plazo de 50 días.
El presidente se elige por un período de cuatro años mediante una votación directa y solo puede cumplir dos mandatos consecutivos. La responsabilidad de supervisar las presidenciales corresponde al Consejo de Guardianes de la Constitución de Irán, compuesto por seis representantes de clero islámico y seis juristas, que tienen el poder de rechazar a cualquier candidato que no cumpla con las normas constitucionales.
El presidente debe ser elegido por mayoría absoluta. Si ningún candidato puede obtener los votos necesarios, una segunda vuelta tendrá lugar el 5 de julio.
Esta vez, de un total de 278 solicitantes, el Comité Electoral registró a 80 candidatos a la presidencia –entre ellos cuatro mujeres– de los cuales seis entraron en la lista final.
Inicialmente, para el puesto del 14 presidente de Irán debían competir el exministro del Interior Mostafa Pourmohamadi (2005-2008); el exsecretario del Consejo Superior de Seguridad Nacional Saeed Jalili (2007-2013); el presidente del Parlamento, Mohamad Bagher Ghalibaf; el alcalde de Teherán, Alireza Zakani; el exministro de Salud y Educación Médica (2001-2005) y miembro del Parlamento Masoud Pezeshkian; el exmiembro del Parlamento (2008-2021) y jefe de la Fundación de Asuntos de Mártires y Veteranos, Sayyid Amir-Hossein Ghazizadeh Hashemi.
Los sondeos revelaron a tres favoritos: el único reformista, Pezeshkian, y dos conservadores, Jalili y Ghalibaf.
Los tres candidatos principales ya participaron en otras carreras electorales: Ghalibaf se postuló para el sillón presidencial en 2005, 2013 y 2017; Pezeshkian, en 2013 y 2021; y Jalili, en 2021.
Los expertos señalan que el actual presidente del Parlamento tiene una experiencia gerente más amplía. Ghalibaf ha dedicado décadas a servir a la República Islámica en varios cargos.
Sin embargo, según las encuestas, ninguno de los políticos goza del apoyo absoluto, por lo que medios de comunicación iraníes pronostican una segunda vuelta electoral.
Unos días antes de las elecciones, el alcalde de Teherán Zakani y el jefe de la Fundación de Asuntos de Mártires y Veteranos Hashemi reiteraron sus candidaturas a favor de Jalili y Ghalibaf, buscando impedir la creación de un gobierno reformista.
Todos los ciudadanos iraníes mayores de 18 años con capacidad jurídica tienen derecho a voto.
Las autoridades de Irán esperan que la participación en los comicios supere el 50 por ciento, aunque en las presidenciales de 2021 fue de alrededor del 48 por ciento, o sea, la participación más baja en los 45 años de la República Islámica. (Sputnik)
Fuente:https://latamnews.lat/
Foto: Tomada de https://twitter.com/teleSURtv
eitmedia.mx