Monterrey, Nuevo León – El Grupo Legislativo del PRI (GLPRI) se pronunció firmemente en contra del plan del gobierno estatal de aumentar las tarifas de transporte público en un 25%, lo que implicaría un incremento del costo para los usuarios de 12 a 15 pesos. Los legisladores argumentan que esta medida representaría un duro golpe a la economía familiar en un contexto donde el servicio de transporte no cumple con los estándares de calidad que merece la población.
Los diputados del PRI señalaron que no apoyarán el aumento de tarifas, ya que consideran que el servicio actual es deficiente. Criticaron la falta de unidades suficientes, la falta de transparencia en los ingresos de las rutas exprés, y el pago por kilómetro recorrido que, según ellos, no justifica un incremento en las tarifas.
Además, los legisladores destacaron las largas filas de hasta dos horas que la población debe soportar para abordar una unidad de transporte que los lleve a sus destinos diarios, como trabajo, escuela o lugares de recreación. Esta situación, afirman, evidencia las deficiencias del sistema actual y refuerza su postura en contra del aumento propuesto.
El GLPRI también cuestionó la falta de estudios técnicos que respalden el ajuste de tarifas en función de la modernización y mejoramiento del transporte. Según los legisladores, sin un análisis riguroso, no se puede justificar un incremento de este tipo.
Finalmente, los integrantes del GLPRI se comprometieron a seguir trabajando para garantizar una movilidad adecuada y de calidad para la gente de Nuevo León, condenando la propuesta del gobierno estatal de “reclasificar” las rutas normales como exprés para justificar el aumento de tarifas.
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