El alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza Santos, quién encabezó junto a David de la Peña (alcalde de Santiago) la reunión entre la Asociación de Alcaldes de Nuevo León y el tesorero estatal, Carlos Garza, dio a conocer que dicha fue para solicitar medidas urgentes ante la reducción en las participaciones federales que afecta a los municipios del estado.
En su intervención, de la Garza explicó que la baja recaudación federal ha generado una disminución de recursos destinados a los municipios, situación que complica la gestión de gastos operativos y salariales. “Pedimos la activación del Fondo de Estabilización, ya que esta situación afecta directamente a la operación y servicios de los municipios,” afirmó el alcalde a la salida de la reunión en la Tesorería estatal.
De acuerdo con el alcalde, el tesorero estatal informó que ya se han iniciado conversaciones con la Federación, la cual ha establecido que el Fondo de Estabilización será activado automáticamente en diciembre. Sin embargo, la situación es incierta, ya que el fondo cuenta con apenas 12,000 millones de pesos para todo el país, y no se ha definido cuánto de estos recursos se destinará a Nuevo León ni a sus municipios en particular. “Nos dijeron que el fondo se activará, pero el monto de compensación para cada municipio aún es incierto”, añadió de la Garza.
La Asociación de Alcaldes también propuso la creación de una mesa de trabajo con tesoreros municipales para coordinar y dar seguimiento a la distribución de estos recursos.
Según el alcalde, esta mesa será esencial para mantener una comunicación constante y asegurar la transparencia en el manejo de las participaciones.
“El tesorero estatal ha mostrado total disposición para convocar a esta mesa de trabajo y cumplir con la ley de coordinación hacendaria”, dijo de la Garza, quien destacó la importancia de que los municipios no queden a ciegas ante los cambios en sus finanzas.
Ante la posibilidad de que la compensación no sea suficiente, los alcaldes ya están analizando alternativas para hacer frente a la situación. “Los municipios más afectados incluso enfrentan dificultades para cubrir nóminas y gastos básicos de operación”, advirtió de la Garza. En el caso específico de Monterrey, la reducción en participaciones ha sido de alrededor del 40% en comparación con el mismo período del año pasado, afectando el presupuesto en unos 100 a 110 millones de pesos solo en octubre.
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