Monterrey, Nuevo León.- El Gobernador de Nuevo León, Samuel Alejandro García Sepúlveda, presentó un ambicioso proyecto para transformar el Parque Fundidora en un “pulmón urbano” renovado, destinado a ofrecer mayor acceso a áreas verdes y recreativas a los ciudadanos. Este anuncio marca un hito en la recuperación de espacios públicos clave en el estado.
Recuperación de espacios para los neoloneses
Acompañado por Bernardo Bichara Assad, presidente ejecutivo del Consejo de Administración del parque, García Sepúlveda subrayó que este proyecto busca devolver terrenos emblemáticos a la ciudadanía. “Esta es tierra de Nuevo León y estará al servicio de su gente. Nuestro compromiso es no solo preservarla, sino transformarla en un espacio funcional, gratuito y accesible para todos”, afirmó el Gobernador.
El rediseño incluye la reintegración de áreas previamente concesionadas, como Plaza Sésamo, que será completamente renovada y reabierta al público bajo una nueva visión social y ambiental.
Un proyecto con impacto a largo plazo
Bernardo Bichara destacó que, en los últimos tres años, se han recuperado más de 120 hectáreas de terrenos en diversas áreas como el Parque del Agua y el Parque Huasteca. Esta recuperación, explicó, forma parte de un esfuerzo conjunto entre el gobierno y el Consejo de Administración para consolidar a Fundidora como un referente de espacio público en la región.
“Nos dijeron que recuperar Plaza Sésamo era imposible, pero aquí estamos, anunciando que lo logramos. Este es un legado para Nuevo León y su gente”, señaló Bichara.
Meta: verano de 2026
El plan contempla una transición progresiva, con la meta de abrir las áreas recuperadas y remodeladas para el verano de 2026. “Pedimos paciencia a los ciudadanos, ya que la transformación de este parque tomará tiempo, pero el resultado será un espacio digno y accesible para todos”, enfatizó García Sepúlveda.
Hacia un Nuevo León más verde y accesible
Con esta iniciativa, el Gobierno de Nuevo León reafirma su compromiso con el desarrollo urbano sostenible, la recuperación de espacios emblemáticos y la mejora en la calidad de vida de sus habitantes. El proyecto promete convertirse en un modelo de urbanismo inclusivo y ecológico en el norte de México.
