Ciudad de México.- El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los derechos Humanos (Acnudh) reconoce este miércoles el trabajo de defensores de personas migrantes en territorio mexicano, para protegerlos de organizaciones criminales que cometen desapariciones, secuestros, ejecuciones, trata y otras graves violaciones en su viaje hacia EU.
“Les quitan todo lo que tienen a los migrantes con la promesa de llevarlos a EU, estos grupos tienen poca o ninguna capacidad para garantizar la seguridad de las personas en todo México”, dice en su testimonio al organismo internacional el defensor de derechos humanos y director de la Casa del Migrante en Saltillo, norte de México, Alberto Xicoténcatl.
Durante más de 20 años, el refugio ha servido como un salvavidas para los migrantes, brindándoles apoyo fundamental en una ruta migratoria muy peligrosa.
Los santuarios de protección de migrantes “son un faro de dignidad y derechos humanos”, dice el informe publicado por Acnudh en inglés con motivo del Día Internacional del Migrante.
TESTIMONIO DE UN DEFENSOR
En el estado del noreste del país norteamericano, se encuentra en un punto crítico de la ruta migratoria: la ciudad de Saltillo, capital del estado desértico y minero de Coahuila, a menudo denominada “la Detroit mexicana”, por su prominencia industrial, atravesada por el famoso tren conocido como “La Bestia” o el “Tren de la Muerte”.
Los migrantes suelen subir a los techos de los vagones para avanzar en sus travesías, que en algunos casos terminan trágicos accidentes.
Xicoténcatl, quien ha dedicado su vida a defender los derechos de los migrantes, a pesar de los riesgos señala: “La injusticia tiene sus raíces en estructuras que explotan la vulnerabilidad, pero estas estructuras no son inamovibles, podemos cambiarlas”.
Los defensores de derechos de los migrantes no utilizan la categoría de ” ilegales”, porque rechazan etiquetar o clasificar a las personas, como buenas o malas por su estatus migratorio.
“Hemos tenido casos de migrantes que han sido obligados a trabajar para el crimen organizado, a cocinar, a lavar o a lavar ropa para sicarios, porque los migrantes están en un estado de completa vulnerabilidad”, dijo Xicoténcatl a la organización internacional.
Cuando los refugios a migrantes comienzan a garantizar protección, dañan los intereses de las organizaciones criminales que cobran hasta 7.000 dólares a cada persona y en algunos casos están coludidas con las autoridades.
“Los grupos criminales están expuestos y pueden ser perseguidos, sin embargo, la colusión con las instituciones del Estado impide que se imparta justicia, perpetuando así la impunidad”, explicó Xicoténcatl.
Salvaguardar los derechos de los migrantes
FENÓMENO MASIVO
La migración es un problema global, y se estima que 281 millones de personas, que son el 3,6 por ciento de la población mundial, viven fuera de sus países de origen, según estadísticas de Acnudh.
“Muchos de estos viajes son impulsados por la desesperación, a menudo derivada de los impactos del cambio climático, ya que las personas huyen de las amenazas a su seguridad, sus medios de vida y su dignidad”, indica el informe del Alto Comisionado.
En México, la oficina de representación del organismo desempeña desde sus establecimiento en 2001 un papel vital en la protección de la población en movilidad hacia EEUU.
“Documentamos las tendencias y características de los flujos migratorios mixtos que ocurren en el país, incluidos los que se inician, pasan, permanecen o regresan”, dijo Jesús Peña Palacios, representante adjunto en la nación latinoamericana.
Acnudh también monitorea el impacto de las políticas estatales, en particular los efectos de las políticas migratorias y de asilo en EU.
Este trabajo ha permitido a la representación permanente “identificar riesgos, brechas y oportunidades para colaborar estratégicamente con autoridades, organizaciones de la sociedad civil, albergues, la Iglesia Católica, la academia y los titulares de derechos”, explicó Peña Palacios.
La organización estima que en el territorio mexicano los migrantes enfrentan desafíos importantes.
Entre los retos menciona: “violaciones a su integridad física y seguridad; acceso limitado a derechos básicos como agua, atención médica y vivienda; detención arbitraria y deportación; discriminación y xenofobia; falta de acceso a la justicia; y dificultades debido a su estatus migratorio irregular”.
El informe cita al Alto Comisionado Volker Türk, quien afirma: “la conexión, la comunidad y la solidaridad son canales probados para el diálogo, la colaboración y las soluciones, debemos rechazar la deshumanización del otro”
La afirmación figura en su declaración de visión para 2024 titulada “Derechos humanos: un camino hacia las soluciones”.
Türk puntualiza: “la difamación de los migrantes, los refugiados, los oponentes políticos y las víctimas de conflictos (una lista que se hace más larga cada día) pone en riesgo a las personas y a nuestras sociedades”.
El país latinoamericano recibió en 2023 aproximadamente 140.000 solicitudes de refugio, lo que representa un máximo histórico. (Sputnik)
Fuente: https://noticiaslatam.lat/
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