Con un amplio respaldo legislativo, el Congreso de Nuevo León aprobó por unanimidad el Paquete Fiscal 2025, que contempla un presupuesto de 156 mil 264 millones de pesos para impulsar obras de infraestructura, movilidad, agua y seguridad en el estado.
Además, se avaló la contratación de una deuda de 8 mil millones de pesos para el Gobierno Central y 2 mil 184 millones para Agua y Drenaje de Monterrey, recursos que serán clave para concluir proyectos estratégicos como las Líneas 4 y 6 del Metro, la Presa Libertad y la modernización de la red de alcantarillado metropolitana.
La presidenta de la Comisión de Presupuesto, Ivonne Álvarez García, destacó que esta inversión permitirá atender problemas urgentes en municipios como García y Escobedo, donde la red de drenaje se encuentra colapsada y se requieren al menos 700 millones de pesos para su rehabilitación.
Inversión en sectores clave
Del total aprobado, se destinarán 3 mil 500 millones de pesos para fortalecer el Poder Judicial, 4 mil 954 millones para la Fiscalía General de Justicia y 550 millones para la Auditoría Superior del Estado. También se asignaron 88 millones de pesos para la Cruz Roja y los cuerpos de bomberos, reforzando la capacidad de respuesta ante emergencias.
En materia de educación, la Universidad Autónoma de Nuevo León recibirá un aumento presupuestal, al igual que las escuelas de tiempo completo. Además, se incrementaron los recursos para programas de atención a niños y mujeres con cáncer, así como apoyos a pequeñas y medianas empresas.
Por otro lado, el Congreso autorizó al Instituto de Movilidad y Accesibilidad la adquisición de 2,500 nuevas unidades de transporte público urbano mediante arrendamiento, con el objetivo de mejorar el servicio para los ciudadanos.
Consenso político para el desarrollo del estado
El coordinador del Grupo Legislativo del PRI, Heriberto Treviño Cantú, subrayó que el acuerdo alcanzado con el Gobierno estatal refleja una muestra de madurez política y responsabilidad. “Era fundamental dar solución a los problemas de movilidad y obras detenidas, y lo logramos a través del diálogo y el consenso”, afirmó.
Con la aprobación de este presupuesto y el financiamiento autorizado, Nuevo León se prepara para un año de transformación, apostando por infraestructura, seguridad y bienestar social para sus habitantes.
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