
Río de Janeiro (Brasil).- El Gobierno brasileño alertó este lunes sobre la posibilidad de una catástrofe climática en caso de inacción de los países frente al calentamiento global, en una carta divulgada por el presidente de la COP30, la conferencia del clima que se celebrará en noviembre en Belém (estado de Pará, norte del país).
“El cambio es inevitable, ya sea por elección o por catástrofe; si el calentamiento global no se controla se nos impondrá el cambio, al desestructurar nuestras sociedades, economías y familias”, afirma el presidente de la COP30, el diplomático André Corrêa do Lago, en el documento, considerado el punto de partida para las negociaciones que deberá conducir Brasil.
En su opinión, el momento es decisivo para poder cumplir con el objetivo de que la temperatura global supere en 1,5 grados centígrados como máximo la temperatura de la Tierra en niveles pre-industriales, algo que ya ocurrió por primera vez en 2024, el año más caliente jamás registrado.
“Juntos, podemos hacer de la COP30 el momento que marque un antes y un después, cuando ponemos en práctica todas nuestras conquistas políticas y nuestro conocimiento colectivo sobre el clima para mudar el curso de la próxima década”, destacó.
En la carta, el máximo responsable de la conferencia del clima reitera que el principal objetivo del encuentro será acelerar la implementación de los objetivos del Acuerdo de París (firmado en 2015) y ampliar la financiación para países en desarrollo, para conseguir al menos 1,3 trillones de dólares al año hasta 2035.
El documento no cita directamente a ningún país, pero hace una velada alusión al Gobierno de EU, que recientemente dejó el Acuerdo de París de forma unilateral.
“Al aceptar la realidad y combatir la catástrofe, el cinismo y el negacionismo, la COP30 debe ser el momento de esperanza y de las posibilidades a través de la acción, jamás de la parálisis y la fragmentación; debemos luchar contra el cambio climático juntos y reactivar nuestras habilidades colectivas”, defiende.
Los activistas ambientales aplaudieron buena parte del documento, pero lamentaron que no haya menciones directas a la necesidad de abandonar los combustibles fósiles, como subrayó en un comunicado el Observatorio del Clima, que agrupa a decenas de entidades y organizaciones ambientalistas y científicas.
“La preocupación es ver que la única solución real para la crisis del clima (la eliminación gradual, justa y equitativa de los combustibles fósiles) aún no consta en la lista de prioridades de la conferencia de Belém”, criticó el observatorio en un comunicado tras conocer el documento oficial publicado por el Gobierno brasileño.
El Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva se enfrenta a la contradicción de sostener un discurso ecologista alejado del negacionismo pero al mismo tiempo defender la explotación de petróleo, incluso en el llamado margen ecuatorial, una región a 500 kilómetros del delta del río Amazonas. (Sputnik)
Fuente: https://noticiaslatam.lat/
Foto: Tomada de https://x.com/Brazil_UN_NY
eitmedia.mx