Elementos del Ejército mexicano y la Guardia Nacional están desplegados en la ruta productiva y de comercialización de la región michoacana de Tierra Caliente, en donde las acciones del crimen organizado han provocado la muerte de jornaleros, productores y empacadores, según informó el diario El Universal.
Dichas acciones forman parte del Plan Michoacán, presentado oficialmente el pasado 4 de noviembre por la presidenta Claudia Sheinbaum, el cual tiene como objetivo erradicar las actividades de los grupos del narcotráfico en la entidad tras los recientes asesinatos del activista y productor de limones, Bernardo Bravo, y el presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo.
El despliegue de seguridad implica el despliegue de más de 10.600 elementos federales, que realizan patrullajes y recorridos de reconocimiento desde las primeras horas del día. La estrategia militar consiste en acompañar la producción desde las huertas hasta los empaques y tianguis limoneros con el fin de reducir los índices de homicidio y extorsión.
Para estas labores, se utilizan vehículos blindados Ocelot, que apoyan en la detección de posibles explosivos, y se realizan inspecciones aleatorias para evitar que personas ajenas a la plantilla laboral extorsionen al personal, entre otras labores.
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