A diez días de que se venza el plazo para votar el Paquete Fiscal 2026, el Congreso de Nuevo León vivió uno de los posicionamientos más contundentes del año. Las bancadas del PAN, PRI y PRD, flanqueadas por el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza Santos, y por representantes de las principales cámaras empresariales, anunciaron sin titubeos que rechazarán el incremento del Impuesto Sobre la Nómina propuesto por el Gobierno del Estado.
El mensaje colectivo fue tan directo como inédito: no existen condiciones para elevar impuestos mientras no haya un compromiso creíble de austeridad, disciplina financiera y uso responsable de los recursos.
El pronunciamiento se realizó en el Salón Bicentenario del Congreso local, donde legisladores y empresarios coincidieron en que un alza al ISN impactaría la competitividad, encarecería las operaciones productivas y terminaría afectando a miles de trabajadores, pymes y cadenas industriales.
Lorena de la Garza Venecia, presidenta de la Comisión de Presupuesto, fue la encargada de fijar la postura de los legisladores. Aseguró que durante esta semana presentarán una contrapropuesta al proyecto del Ejecutivo, la cual no incluirá modificaciones que aumenten la carga fiscal.
Dijo que no existe espacio para negociar un incremento del 33 por ciento al ISN, como plantea el Ejecutivo. Consideró que Nuevo León ha salido adelante por el empuje de su industria y el trabajo de su gente, no por elevar impuestos a quienes producen. Señaló que antes de pedir más recursos, el Gobierno debería demostrar disciplina, transparencia e indicadores claros de desempeño.
La diputada panista Claudia Caballero Chávez respaldó la postura y denunció que el Estado insiste en cerrar filas sobre un gasto excesivo, particularmente orientado a la promoción de dos figuras políticas. Calificó como inadmisible solicitar más carga impositiva mientras no se corrigen los excesos.
El alcalde Adrián de la Garza Santos se sumó al rechazo al advertir que un aumento al ISN tendría efectos inmediatos en la atracción de inversión, la apertura de negocios y la creación de empleos. Subrayó que este no es un tema técnico, sino humano, porque afectaría directamente el bolsillo de las familias. Pidió al Congreso frenar la propuesta y recordó que Nuevo León no avanza levantando barreras a quienes generan trabajo.
El sector empresarial también cerró filas. Representantes de Caintra, Coparmex, Canadevi, Caprobi, Index, Canaco, Ccinlac y diversas pymes acudieron para respaldar el posicionamiento. Jorge Santos, presidente de Caintra, afirmó que aumentar el ISN no resolvería los retos financieros de la entidad, pero sí abriría la puerta al malgasto y a la pérdida de competitividad. Exigió al Gobierno del Estado ajustarse el cinturón, recortar excesos y ordenar sus finanzas antes de intentar cargar más impuestos a la iniciativa privada.
Santos advirtió que el sector productivo no permitirá que se utilice la presión fiscal como herramienta para suplir la falta de planeación. Recordó que en múltiples ocasiones han señalado áreas de oportunidad para ajustar el gasto gubernamental sin afectar a las empresas ni a los trabajadores.
Las bancadas del PAN, PRI y PRD se comprometieron a sostener esta postura hasta la votación final del Presupuesto 2026. Aseguraron que la responsabilidad del Congreso es proteger a quienes producen, innovan y mantienen la economía de Nuevo León en marcha.
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