En el Sport City de Ladrillera la rutina vespertina se puso incómoda cuando un hombre decidió que, además de hacer ejercicio, también era buen momento para presumir aquello que nadie le pidió ver. A las 18:00 horas, y en plena hora pico, Eduardo H., de 44 años, terminó detenido por la Policía de Monterrey después de que una mujer de 37 años denunciara que el sujeto le enseñó sus partes íntimas como si estuviera en una pasarela muy desubicada.
La mujer relató que intentó continuar su rutina y retirarse sin armar escándalo, pero el tipo, lejos de recular, la siguió acosando dentro del gimnasio, como si su desafortunada exhibición fuera digna de repetición. Fue entonces cuando pidió apoyo a los elementos municipales.
Los oficiales, que patrullaban la zona como parte del programa Escudo, llegaron al sitio para confirmar que, en efecto, el caballero seguía ahí, muy tranquilo, como si no hubiera puesto un circo con todo y acto principal. Tras escuchar a la afectada, procedieron a detenerlo por ultrajes a la moral.
El hombre fue trasladado a las instalaciones de la Policía de Monterrey y quedó en manos del Ministerio Público, mientras los usuarios del gimnasio seguramente agradecieron que, por lo menos en esta ocasión, la autoridad llegó a tiempo para evitar que la sesión de ejercicio incluyera espectáculos no aptos para nadie.
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