Koroliov (Rusia).- El módulo de descenso de la nave Soyuz MS-23 con los cosmonautas rusos Serguéi Prokópiev y Dmitri Petelin, así como con el astronauta estadounidense Francisco Rubio, que batieron un récord de permanencia en el espacio, aterrizó en las estepas de Kazajistán.
Al aterrizar al sureste de la ciudad de Zhezkazgan (centro) el equipo, los servicios de rescate evacuaron la tripulación.
A las 7.55 GMT la Soyuz MS-23 se desacopló de la Estación Espacial Internacional (EEI) y pocas horas después inició su salida de la órbita, separándose en compartimentos. A continuación, la cápsula tripulada entró en la atmósfera terrestre.
Prokópiev cumplió su segundo vuelo espacial, mientras que Petelin y Rubio trabajaron en la órbita por primera vez.
La tripulación permaneció en el espacio 371 días, lo que constituye la misión más larga en la EEI.
Los tres llegaron a la EEI el 21 de septiembre de 2022 a bordo de la nave rusa Soyuz MS-22.
El pasado 15 de diciembre, según los datos oficiales, un micrometeorito provocó la despresurización del sistema de enfriamiento de la Soyuz.
Los expertos opinaron que era peligroso emprender el vuelo de regreso en esa nave, y los tripulantes se vieron obligados a quedarse en la EEI por otros seis meses. Para sustituir la nave dañada, a la EEI se envió la Soyuz MS-23.
En la EEI permanecen los integrantes de la 70 expedición duradera: los rusos Oleg Kononenko, Nikolái Chub y Konstantín Borísov, las estadounidenses Jasmin Moghbeli y Loral O’Hara, el danés Andreas Mogensen y el japonés Satoshi Furukawa.
Fuente:https://sputniknews.lat
Foto: Nasa
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