Donald Trump se mantiene como el favorito de su partido para obtener la candidatura presidencial y contender nuevamente por la presidencia de Estados Unidos frente al actual mandatario Joe Biden. Este 23 de enero, el empresario republicano ganó en otras primarias, las del estado de New Hampshire.
A pocas horas de que comenzara la disputa electoral, Trump venció a su única rival interna, la exembajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, quien incluso admitió su derrota, pero advirtió que seguirá en la contienda.
Aunque hasta el momento los resultados son preliminares con el 50% de los votos contados, el exmandatario lleva una amplia ventaja sobre Haley. Además, los grandes medios norteamericanos como CNN y AP también le otorgaron la victoria.
“Quiero felicitar a Donald Trump por su victoria de esta noche. Se la ha ganado”, dijo Haley.
Sin embargo, inmediatamente después aclaró que no se baja de la lucha republicana por la Casa Blanca: “Esta carrera está lejos de haber terminado”.
Se trata de la segunda victoria consecutiva de Trump en las primarias republicanas tras su triunfo récord en los caucus de Iowa. En esa contienda, Trump quedó primero con un 51% de los votos, seguido por el gobernador de Florida, Ron DeSantis (21,2%), mientras que Haley sacó un 19,1% y el empresario Vivek Ramaswamy un 7,7%. Tanto DeSantis como Ramaswamy ya se bajaron de la carrera y manifestaron su apoyo al magnate de 77 años.
Las votaciones de caucus y primarias —son modalidades distintas— permiten elegir a los delegados que, en las convenciones de verano de los partidos Republicano y Demócrata, designarán a los candidatos a presidente y vicepresidente. Esto quiere decir que este proceso es vital para definir los nombres que aparecerán en las papeletas electorales rumbo a los comicios presidenciales de Estados Unidos, que se llevarán a cabo el próximo noviembre de este año.
Fuente:https://sputniknews.lat/
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