Frente al crecimiento alarmante del robo de identidad a través de tecnologías como los deepfakes, la diputada Ana González González hizo un llamado enérgico a la Secretaría de Gobernación para reforzar las estrategias de ciberseguridad en el país, con el objetivo de frenar esta modalidad de fraude digital que afecta cada vez a más mexicanos.
La legisladora del PRI advirtió que la sofisticación de estas herramientas, capaces de replicar rostros y voces con alto grado de precisión, está siendo utilizada para engañar, suplantar identidades y cometer fraudes, lo que representa un desafío urgente en el entorno digital. “Los deepfakes son herramientas tecnológicas capaces de imitar de forma muy precisa la apariencia y la voz de una persona, lo que los convierte en instrumentos perfectos para el engaño y la usurpación de identidad”, explicó.
De acuerdo con cifras compartidas por González, México ocupa el octavo lugar a nivel mundial en robo de identidad, y el uso de inteligencia artificial con fines delictivos ha crecido un 218 por ciento desde 2013. El daño económico por este tipo de fraudes, señaló, puede ir desde los mil hasta los 50 mil pesos por caso.
Uno de los sectores más expuestos, dijo, es el de los jóvenes. “El 42.4 por ciento de los menores de 21 años desconoce los riesgos asociados a esta tecnología”, alertó, al tiempo que subrayó la necesidad de una respuesta institucional coordinada.
Aunque el uso de inteligencia artificial en México ha crecido de manera exponencial —con un aumento del 965 por ciento en el número de empresas que la han adoptado entre 2018 y 2024, según el QS World Future Skills Index—, González subrayó que esta expansión tecnológica también obliga a tomar medidas inmediatas para proteger la privacidad y seguridad de los ciudadanos.
“Es urgente que el Estado mexicano ponga en marcha políticas eficaces y campañas informativas que permitan enfrentar esta problemática, proteger a la población y garantizar la seguridad de los datos personales”, concluyó.
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