Sean “Diddy” Combs, icónico rapero y magnate de la música, fue arrestado el lunes por la noche en Nueva York tras ser acusado de cargos graves que incluyen crimen organizado, tráfico sexual y transporte para prostitución. Las acusaciones surgen luego de meses de rumores y demandas civiles en su contra por abuso sexual, todas las cuales Combs ha negado vehementemente.
La acusación formal, presentada en un tribunal federal de Manhattan, señala que Combs lideró una red de abuso y explotación sexual. Según los documentos judiciales, se le acusa de coaccionar y abusar de mujeres para que participaran en eventos sexuales, conocidos como “freak offs”, los cuales eran organizados y grabados por el artista. Además, se le imputa haber utilizado violencia y amenazas para mantener en silencio a las víctimas.
El fiscal federal Damian Williams, durante una conferencia de prensa, afirmó que Combs y sus asociados ejercieron control sobre las víctimas a través de drogas como ketamina y GHB, además de usar videos como “colateral” para evitar que se denunciaran los abusos. Las investigaciones también revelaron que en las propiedades del rapero se encontraron armas ilegales y grandes cantidades de lubricantes utilizados durante estos encuentros.
El abogado de Combs, Marc Agnifilo, ha defendido públicamente a su cliente, declarando que pelearán con todas sus fuerzas para demostrar su inocencia. “Sean Combs es un hombre de negocios exitoso, filántropo y padre dedicado, y estas acusaciones no son más que una injusticia”, afirmó Agnifilo. Asimismo, subrayó que Combs ha cooperado plenamente con las autoridades desde el inicio de la investigación.
A pesar de las declaraciones de su abogado, el gobierno ha solicitado que Combs permanezca detenido sin derecho a fianza, argumentando que, debido a su riqueza y conexiones, es un riesgo de fuga. Los fiscales también señalaron que Combs había intentado obstruir la investigación federal, presionando a testigos y víctimas para que mantuvieran una narrativa falsa.
De ser hallado culpable, Combs podría enfrentar un mínimo de 15 años de prisión, con la posibilidad de cadena perpetua. Las próximas semanas serán cruciales, ya que su equipo legal buscará obtener la libertad bajo fianza mientras que los fiscales seguirán presentando más pruebas en su contra.
Por: Abril Ledesma- eitmedia.mx
Foto: @Complex
