El Congreso de Nuevo León aprobó un acuerdo que obliga a los funcionarios estatales a prestar juramento de decir la verdad antes de ser interrogados durante la Glosa del Tercer Informe de Gobierno.
A partir del próximo 30 de octubre, quienes comparezcan ante los diputados deberán comprometerse a responder de manera veraz y sin omisiones, enfrentando sanciones en caso de incumplimiento.
El acuerdo, presentado por la Comisión de Coordinación y Régimen Interno, incluye medidas para garantizar que los funcionarios se conduzcan con transparencia en sus respuestas.
En caso de respuestas evasivas, la presidenta del Congreso, Lorena de la Garza Venecia, tendrá la facultad de solicitarles que respondan de manera clara y específica. Si persisten en su postura, se les dará un plazo de cinco días para presentar una respuesta por escrito.
De continuar con respuestas insatisfactorias o evasivas, los funcionarios podrán ser sancionados conforme a la ley, con medidas que van desde una amonestación hasta una multa económica.
Este proceso de juramento se implementará en cada comparecencia, reforzando la obligación de apegarse a los términos de las preguntas formuladas.
La bancada de Movimiento Ciudadano, representada por la diputada Sandra Pámanes Ortiz, expresó su desacuerdo con esta medida, solicitando que la Glosa se realizara de forma tradicional. Sin embargo, su propuesta fue rechazada por el pleno, quedando firme la exigencia de transparencia para todos los funcionarios.
La Glosa del Informe se llevará a cabo en distintas fechas: el 30 de octubre se abordará el Eje de Buen Gobierno, el 5 de noviembre el de Generación de Riqueza Sustentable, y el 12 de noviembre el Eje de Igualdad. Los funcionarios ausentes o que no respondan de forma adecuada deberán presentarse en sesiones adicionales a lo largo de noviembre y diciembre para completar el proceso.
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