En vísperas de las celebraciones de fin de año, el diputado local Armando Víctor Gutiérrez pidió frenar el uso de pirotecnia para proteger la integridad de la población, el entorno y, sobre todo, a quienes son más vulnerables a los estruendos, como las personas con autismo. El legislador advirtió que la discusión no se limita a accidentes o quemaduras, sino al impacto que las decisiones impulsivas pueden tener en familias y comunidades completas.
Gutiérrez insistió en que los ruidos intensos de cohetes y artefactos similares pueden detonar crisis de ansiedad, episodios de estrés o dolor sensorial en personas con hipersensibilidad auditiva, una realidad que —subrayó— rebasa cualquier percepción de simple incomodidad. También señaló que el uso de pólvora suele ignorar sus efectos en la salud pública y en el ambiente.
El diputado remarcó que la responsabilidad social implica considerar a quienes viven con sensibilidades aumentadas. Afirmó que abstenerse de utilizar pólvora representa un acto de respeto y empatía hacia este sector, especialmente durante fechas en las que la convivencia suele ser más intensa.
Como alternativa, propuso optar por actividades culturales y espectáculos de luces que no involucren estruendos, pues son opciones más seguras para niñas, niños, adultos mayores y personas con necesidades sensoriales particulares. Aseguró que cuidar el ambiente y proteger a los grupos sensibles es, más que una recomendación, una obligación moral.
Gutiérrez cerró su mensaje con un llamado a mantener el respeto hacia la diversidad de necesidades dentro de la comunidad, con el propósito de conservar las tradiciones sin comprometer la estabilidad emocional ni la salud de los ciudadanos.
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