Río de Janeiro (Brasil).- La previsión de producción agrícola de Brasil para este año se revisó a la baja en agosto debido a los problemas climáticos, sobre todo las inundaciones de mayo en el sur del país y la actual sequía, según el informe mensual del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) publicado este jueves.
“La estimación de agosto de 2024 para la producción de cereales, leguminosas y oleaginosas es de 296,4 millones de toneladas, un seis por ciento menos que la obtenida en 2023 (315,4 millones de toneladas), una reducción de 19 millones de toneladas”, informó el organismo estatal.
La falta de lluvias y las temperaturas demasiado altas en la primera cosecha del verano impactaron en el sector agrícola.
También tuvieron un fuerte impacto las inundaciones históricas de mayo en el estado de Rio Grande do Sul (extremo sur del país).
Según las estimaciones del IBGE, esas inundaciones “pueden haber retirado cinco millones de toneladas de la cosecha brasileña de cereales, leguminosas y oleaginosas”.
La situación no es peor porque cuando llegaron las lluvias la mayor parte de la cosecha de arroz, soja y maíz ya se había recolectado.
El sector agrícola es uno de los pilares de la economía de Brasil; el año pasado, el producto interior bruto (PIB) creció un 2,9 por ciento, más de lo esperado, por los buenos resultados del sector, que avanzó un 15,1 por ciento.
Además de ralentizar el crecimiento económico, el impacto de las inundaciones y la actual sequía pueden impactar también en el aumento del precio de los alimentos en las próximas semanas y meses, como reconoció esta semana el Ministerio de Economía. (Sputnik)
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